Podría afirmar que cualquier religión me parece una construcción supersticiosa contraria a la inteligencia y la ciencia, incluso a la sensatez. Pero, en este caso, no es relevante lo que a mí me parezca.Cualquier religión es una construcción económica. Eso sí.La Iglesia católica, en concreto en España, es económicamente rampante, boyante y poderosa gracias, entre otras cosas, a la millonada de dinero público que recibe. Del suyo y del mío.Ver a un presidente de Gobierno jurar su cargo ante una Biblia y un crucifijo da una idea del retraso que sufrimos, inmenso, hondísimo retraso, y de lo que nos queda.***
Dejo aquí una repostería variada sacada de entre los archivos de mis colegas:
(Infolibre: AQUÍ)
(Eldiario: AQUÍ)
(Público: AQUÍ)
(El País: AQUÍ)
(La Marea AQUÍ)
(Público: AQUÍ)
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“Por alusiones”, entren en la página de Laicismo.org, entidad a la que se refieren algunas de las noticias anteriores. Nada, por si les faltan argumentos.***
Amen.Sabrán apreciar que haya evitado al ministro Fernández Díaz y su ángel Marcelo. Buenas noches.29/10/2016. Investidura mal escrita, mal interpretada, mal iluminada