Hoy es la fecha elegida por los trabajadores del telemarketing para culminar, al menos de momento, su agitado calendario de movilizaciones. 28 de noviembre. Huelga en todo el Estado en el sector del Contact Center.
Las cifras nos alertan de que es un sector donde impera la precariedad. Más de 100.000 personas trabajan en esta profesión donde las nuevas tecnologías se han orientado más al control de los tiempos de trabajo –en una suerte de taylorismo sin otra recompensa que sobrevivir al despido– que a satisfacer las necesidades de los clientes. Precisamente por ello, las gentes del telemarketing han hecho también pública su consigna de cara a los consumidores: la lucha de los teleoperadores será también fundamental para que los usuarios obtengan unos servicios de atención al cliente de mayor calidad.
Demandan salarios dignos, ya que la media del sector es de apenas 650€. Demandan condiciones de trabajo más estables, ya que las jornadas parciales y los contratos temporales son la norma. Demandan por tanto profesionalizarse y trabajar en condiciones dignas para poder ofrecer así un mejor servicio a la ciudadanía. Su compromiso con los clientes se impone así a los intereses de las macroempresas de Contact Center, cuyo único papel parece reducirse a ser intermediarias de mano de obra entre las grandes compañías del Ibex35 (telecos, banca telefónica, aseguradoras, energéticas o incluso administraciones públicas) y los usuarios de dichos servicios fundamentales. Basta con echar un vistazo a sus balances económicos para comprender esta última afirmación: más del 80% de sus gastos se destinan al pago del personal.
Se trata de un sector que, aún durante los años más duros de la crisis económica, ha batido records de facturación año tras año. La externalización de empleos de mayor calidad ha sido su nicho de negocio. Sin embargo, los trabajadores de este sector han perdido más de un 5% de poder adquisitivo en los últimos cinco años. Una porcentaje alarmante, teniendo en cuenta los bajos salarios que perciben por desempeñar sus tareas.
Tras el éxito de la convocatoria del pasado 6 de octubre, los sindicatos que convocan la jornada de huelga estatal de hoy (CGT-CCOO-UGT) esperan que el seguimiento supere incluso los datos registrados en octubre. Su estrategia, además de abarcar los centros de trabajo, está también dirigida a la ciudadanía. Por ello realizarán hoy una intensa actividad en redes sociales para hacer un llamamiento público. “Si los consumidores desean un mejor servicio, hoy es el día más idóneo para llamar a los números de atención al cliente. La gente que esté interesada en apoyar esta iniciativa puede seguir nuestra actividad de este lunes en la cuenta de twitter @cgttelem”, comenta Santiago Alonso de CGT.
Cabe destacar que es un sector fuertemente feminizado. El 70 por ciento de las personas ocupadas en esta actividad son mujeres. Sin embargo, buena parte de las empresas que forman la patronal del sector (Ace) no tienen todavía Planes de Igualdad, pese a que la ley es del año 2007. Se cumple, por tanto, otro de los paradigmas de la triste realidad laboral de este país: trabajo feminizado suele ser sinónimo de precariedad.
Los representantes sindicales tal vez acierten en su diagnóstico. Tal vez el futuro de los consumidores dependa, en buena medida, del triunfo de estas reivindicaciones laborales. Lo que parece indiscutible, en todo caso, es que los servicios de atención al cliente de este país no cuentan con el beneplácito de los consumidores.
Algo debe cambiar en estos servicios. Quienes los dirigen deberían reflexionar al respecto.