El triple salto español jamás había conseguido una medalla olímpica. Hasta hoy. Ana Peleteiro ha tocado la gloria con un bronce histórico que será recordado para siempre. La atleta natural Ribeira despegó hasta los 14,87 metros en el mejor de sus saltos, lo que le llevó a la medalla de bronce. El primer y segundo puesto, inalcanzables, fueron para la reina de esta prueba, Yulimar Rojas (¡Récord del mundo con 15,67 metros!) y para la portuguesa Patricia Mamona.
Peleteiro, que desde los 18 años apuntaba a gran atleta ha conseguido un hito que, seguramente, ni ella misma imaginaba. El pasado viernes, tras concluir la clasificación, afirmaba que la medalla era muy difícil, pero que sabía que podía conseguirlo si estaba cerca de su mejor marca. Y eso hizo. La gallega ha respondido en la fecha y la hora que había que hacerlo. Un carácter especial.
Un récord brutal
La plusmarquista nacional, entrenada por la leyenda Iván Pedroso, se quedó hace unas semanas a un centímetro del oro europeo en los campeonatos de Torun. Ana Peleteiro tenía una espinita clavada, y esta noche se la sacó con creces. Una atleta muy bien entrenada, con gran carácter y que maneja como pocas la presión. Su marca personal, y por supuesto récord de España, estaba en 14,73. Esta noche, en una final olímpica, lo supero en 14 centímetros. Una salvajada.
Hace dos días, la coruñesa dijo que “la final será otro rollo”. El rollo de Peleteiro es el de ser una auténtica campeona. Su estilo ha conquistado a toda España, y especialmente a su Ribeira natal, que vivió la final en una pantalla gigante en el centro del pueblo. Gracias, Ana, por hacernos vibrar. ¡Ya van 7!