La Guardia Civil ha detenido a un empleado del operativo de extinción de incendios forestales por su presunta implicación en el gran fuego que devastó cerca de 2.200 hectáreas en la comarca abulense del Valle del Tiétar, afectando principalmente a Cuevas del Valle, Mombeltrán y El Arenal.
El incendio, declarado la noche del 28 de julio de 2025 junto a la N-502, se extendió rápidamente debido a las adversas condiciones meteorológicas y el viento, lo que obligó a confinar por prevención a los habitantes de dos localidades.
La investigación policial, desarrollada en coordinación con la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) de la Junta de Castilla y León, determinó la intencionalidad del fuego tras inspecciones técnicas y recabar pruebas sólidas en el terreno.
Fuentes oficiales señalan que el detenido mostró una “actitud evasiva” durante los primeros interrogatorios y, finalmente, admitió su responsabilidad ante los agentes. Se ha constatado que sus motivos guardaban relación directa con el ámbito laboral, ya que logró un contrato de trabajo en equipos de extinción apenas diez días después del siniestro.
El caso ha sido puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Arenas de San Pedro y la Fiscalía Provincial de Medio Ambiente, subrayando la gravedad ambiental y social del suceso. SEPRONA y los equipos especializados de la Guardia Civil participaron activamente en la operación, que resultó clave para esclarecer el origen de uno de los mayores incendios forestales registrados este verano en Castilla y León.