Ayer se conocía la resolución de la juez de lo Contencioso Administrativo de Mallorca, que consideraba que había que desconfinar a los jóvenes que estaban en el hotel Bellver aislados por posibles contactos con positivos, en el contexto del macrobrote que ya se ha cobrado cerca de 6.000 positivos en toda España.
La juez que toma decisiones sin seguir las pautas científicas
La juez consideraba que el decreto del Govern Balear había tomado medidas comprensibles pero excesivas, y asumiendo la postura de la Fiscalía, decidió terminar con el confinamiento que se había impuesto para casi doscientos jóvenes estudiantes. Eso sí, mantuvo confinados a los que habían dado positivo: solamente podían marcharse del hotel los que tuvieran una PCR negativa.
Este criterio de la juez no va en la línea de las medidas sanitarias que se han mantenido hasta ahora. Abre un precedente peligroso porque aquellas personas que han estado en contacto con personas infectadas deben pasar un periodo de cuarentena de diez días, aisladas, por posible propagación del virus aunque sus PCR den negativas.
Las críticas a la decisión de la juez no se han hecho esperar, puesto que abrir la puerta a decenas de jóvenes que podrían estar infectados supone aumentar el riesgo para la salud de la población, que ya ha visto cómo los positivos han llegado casi a 6.000 personas desde que los 3.000 estudiantes comenzaron a volver a sus casas.
Doce han dado positivo
Y efectivamente, hoy se ha conocido que, entre los jóvenes a los que se iba a desconfinar, ha habido ya 12 positivos. Lo cierto es que estos datos se han obtenido gracias a que una treintena de los 181 que podían marcharse, aceptaron hacerse pruebas voluntarias. Fue entonces cuando saltó el resultado.
Los jóvenes peninsulares que permanecen ahora mismo en el hotel aislados son 75 y la tasas de positividad de este brote llega al 26%. Son 16 los jóvenes que están en estos momentos ingresados en el Hospital de Son Espases, en estado leve y uno tuvo que ser atendido en la UCI.
Entre los jóvenes que han vuelto hoy hacia la península en un barco "burbuja" la mayoría han dado negativo en las PCR, pero no todos se han hecho pruebas, porque algunos se han negado, señalando que "no han tenido contacto con ningún positivo", y no se les puede obligar a hacerse ningún tipo de prueba sobre su salud.