El 29 de septiembre de 2012 se celebró en Madrid la manifestación "Rodea el Congreso", en la que miles de manifestantes se dieron cita en la céntrica Plaza de Neptuno, cercana al Congreso de los Diputados.
Tras las protestas, la Policía Nacional "barrió" la zona colindante, que en la zona de Huertas está llena de bares. Allí acudieron agentes policiales, del grupo de antidisturbios, llegando a entrar en un bar sin justificación alguna, sacando de allí a personas que se encontraban tomando una consumición. Entre las personas a las que sacaron, arrastrándolas y por la fuerza, sin mediar palabra, se encontraba una mujer a la que, en la calle, golpearon en la cabeza de manera reiterada.
El parte de lesiones refleja haber sufrido una herida inciso contusa con sangrado abundante, traumatismo craneoencefálico leve y policontusión.
Ante semejantes hechos, la mujer interpuso una denuncia que fue sobreseída por la Audiencia Provincial de Madrid el 21 de mayo de 2014. Se justificó por parte del tribunal para ordenar el archivo que las lesiones no quedaban acreditadas como consecuencia de una acción que fuera dolosa o negligente por parte de la policía.
La mujer recurrió el archivo y acudió al Tribunal Constitucional, donde el caso tampoco se admitió. Fue entonces cuando su abogado, Eric Sanz de Bremond, decidió acudir al Tribunal Europeo de Derechos Humanos y abrir también la vía contencioso administrativa.
El proceso contencioso administrativo reconoció una indemnización de 750 euros a la víctima.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha condenado a España por vulnerar el Convenio Europeo de Derechos Humanos, en su artículo 3, por lo que le insta a pagar 1.000 euros a la víctima.
Policía sin número de identificación
La ley establece que los agentes de policía tienen que llevar, de manera visible, su número de identificación, algo que en muchos casos no sucede. Precisamente por esta razón, el TEDH considera que se ha imposibilitado encontrar al agente que cometió la agresión y así poder abrir una investigación.