Emmanuel Macron, presidente de Francia, ayudó al desarrollo de la compañía Uber en Francia cuando estaba al frente del ministerio de Economía. En ese momento, según el informe que ha aprobado la comisión parlamentaria francesa sobre la investigación de este asunto, "mantenía una relación opaca y privilegiada con la plataforma estadounidense".
En el informe final, presentado hoy martes, y validado por todos los diputados de la oposición parlamentaria y con la abstención de los diputados del partido de Macron, los redactores subrayan que Uber encontró aliados en el nivel más elevado del Estado.
Relación opaca y privilegiada
Indican que la intensidad de los contratos entre Uber, Emmanuel Macron y su gabinete "muestran una relación opaca y privilegiada, y pone en evidencia la incapacidad de nuestro sistema para evaluar y prevenir la influencia de los intereses privados sobre la decisión pública".
Según publica SWI, el principal reproche que se le hace al actual presidente francés es haber establecido un acuerdo tácito con la plataforma cuando era ministro de Economía, entre agosto de 2014 y el de 2016 para rebajar el número de horas de formación obligatorias para sus conductores, a cambio de la prohibición de Uber Pop, un dispositivo que permitía a cualquiera convertirse en chófer ocasional.
Donaciones a la campaña y al partido de Macron
Lo que, sin embargo, no se ha podido demostrar, es que el apoyo a Uber se haya hecho a cambio de algún tipo de beneficio para Macron. Al menos no directamente, porque un lobista que trabaja para Uber, ha afirmado haber hecho donaciones para la campaña presidencial de Macron, y que, además, participó en una operación para buscar fondos para el partido del actual presidente.