Eulen, la empresa de la hermana de Alberto Núñez Feijóo adjudicataria de decenas de contrataciones a dedo, es una especie de dios al que todos rinden pleitesía en la Administración gallega. Según el diario El Salto, “el modus operandi, a nivel estructural, es el siguiente. El Gobierno gallego, a través de todos los organismos que dependen de sus decisiones políticas, como consellerías, agencias públicas, consorcios, organismos autónomos, fundaciones del sector público, sociedades mercantiles públicas y otros entes como institutos sectoriales o centros de innovación, elige contratar de manera unilateral con el entramado empresarial de Eulen (Eulen Centro Especial de Empleo, Eulen Seguridad y Eulen Servicios Sociosanitarios). Gracias a su diversificación, esta empresa cuenta con servicios de todo tipo que puede vender a toda la infraestructura de la Xunta, aunque lo más conocido popularmente, es su servicio de seguridad”.
Es decir, la compañía dirigida en el norte de España por Micaela Núñez Feijóo, extiende sus tentáculos por todos los departamentos e instituciones de la Xunta. “La 1.311 facturas que la empresa de la hermana de Alberto Núñez Feijóo ha pasado a organismos dependientes de la Xunta de Galicia entre 2018 y 2023 suman un total de 4.832.029,85 euros y ninguna de ellas ha tenido que ser sometida a concurso público. Se trata de cerca de cinco millones de euros directos a las cuentas de Eulen, dirigida por Micaela Núñez Feijóo en el norte del Estado español, sin tener que ser sometidos a la competencia del sector y mucho menos fiscalizados en las grandes licitaciones de servicios contratados por la Administración gallega”, añade El Salto.
“Precisamente en esa rama de negocio es donde más previsible parecen los tipos de servicios contratados y, por lo tanto, donde las consellerías podrían aunar sus licitaciones, pero no lo hacen. Sin ir más lejos, en los datos públicos de la Consellería de Sanidade, hasta 14 contratos llevan por concepto el mismo nombre, “seguridad”; el mismo importe, 10.834,55 euros; y son, además, facturados mes a mes al mismo organismo. Con ese mismo concepto escueto aparecen 128 facturas más. De esta manera, la empresa dirigida por Micaela Núñez evita proporcionar un único paquete de servicios que debería ser sacado a concurso público por la Xunta, ya que. parece bastante previsible, un mismo centro debería necesitar los mismos servicios de seguridad a lo largo del tiempo o, al menos, no una actualización mensual de sus condiciones”, informa el citado medio.
A pesar de que la Ley de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno obliga a todas las administraciones del Estado español a publicar todos y cada uno de los contratos que suscriben, con indicación del objeto, duración, el importe de la licitación y de adjudicación, el Portal de Transparencia de la Xunta de Galicia es ambiguo en casi todos los contratos que no superan los 15.000 euros. “Desde luego, no porque sean pocos. En los últimos cinco años, el Gobierno de Feijóo y después el de Alfonso Rueda firmaron por esta vía nada menos que 1.034.964 pequeños contratos por valor de 4.000 millones de euros”.
Además de dificultar el acceso a los contratos públicos y hacer que los procesos de búsqueda sean extremadamente complicados, los contratos que la Xunta hace públicos a menudo resultan incomprensibles. La infraestructura del Portal de Transparencia apenas permite investigaciones avanzadas y ni siquiera hacer búsquedas por los nombres de las empresas adjudicatarias. En muchas ocasiones, los contratos se presentan con títulos tan vagos como “Edificios y otras construcciones”, lo cual ocurre en 85 casos. Además, en 170 ocasiones, la administración simplemente menciona el nombre de la escuela donde Eulen presta algún servicio sin especificar en qué consiste. La situación no termina ahí. Eulen ha facturado a la Consellería de Sanidade y al Sergas en 39 ocasiones por “material no sanitario” sin proporcionar más detalles.
Además de lo relatado, en las pasadas semanas, el diario Público ha ido desgranando la influencia de otra de las familiares del presidente del Partido Popular en la contratación pública en Galicia. Su nombre es Eloína Núñez Masid, prima de Alberto Núñez Feijóo y exgerente de los hospitales públicos de Santiago de Compostela y la comarca coruñesa de O Barbanza. Desde su posición, gestionó dos contratos del Servizo Galego de Saúde (Sergas) que asignaron un total de 3.931.924,43 euros a Eulen.