La OPAQ es la Organización para la Prohibición de Armas Químicas, siendo y el órgano de aplicación de la Convención sobre las Armas Químicas que entró en vigor el 29 de abril de 1997. Son 193 los Estados miembro que la conforman actualmente.
En la celebración de la 106ª sesión del Consejo Ejecutivo de la OPAQ, el teniente general Igor Kirillov, jefe de las tropas de protección radiológica, química y biológica de Rusia, ha intervendio para presentar un informe mediante el cual se presentan las evidencias de la existencia de un laboratorio de armas químicas el ejército ucraniano, que ha sido descubierto cerca de Avdeyevka. Se denuncian casos de uso de cloropicrina por parte de Ucrania cerca de Conetsk, Gorlovka y Artyomovks.
A través de la agencia rusa de noticias TASS se ha dado a conocer el contenido de las declaraciones, que pasamos a traducir para nuestros lectores:
"Bomba sucia
El Ministerio de Defensa de Rusia sigue registrando violaciones por parte de Ucrania de instrumentos internacionales fundamentales, como la Convención sobre Armas Químicas.
Cabe señalar que la información publicada por el Ministerio de Defensa de Rusia en su última reunión informativa sobre las violaciones por parte de los EE. UU. y Ucrania de sus obligaciones en el campo de la no proliferación de armas de destrucción masiva ha sido escuchada por la comunidad de expertos.
Los medios de comunicación europeos y estadounidenses, así como los sitios web de noticias de toda la región Asia-Pacífico, publicaron comentarios relevantes.
Se hizo especial hincapié en la expansión de la investigación biológica militar en África. Por ejemplo, el Daily Telegraph señaló que “cuando Rusia logró detener los programas de guerra biológica en Ucrania, el Pentágono se vio obligado a trasladar investigaciones incompletas que formaban parte de proyectos ucranianos a otras regiones”.
Además, algunas publicaciones expresaron su preocupación por la creación por parte de Ucrania de una “bomba sucia” con sustancias radioquímicas. La importación de combustible nuclear gastado y de subproductos de la producción de sustancias químicas peligrosas continúa a través de Polonia y Rumania, convirtiendo a Ucrania en un vertedero de desechos de alto riesgo. Este proceso es supervisado por el jefe de gabinete de la oficina presidencial ucraniana, Andrey Yermak, y patrocinado por la Fundación Soros.
Uso de armas químicas por parte de Ucrania
El régimen ucraniano viola regularmente la Convención sobre Armas Químicas. Durante la operación militar especial se registró que Ucrania utilizó sustancias químicas tóxicas no letales más de 400 veces, la mayoría de los casos confirmados oficialmente por el laboratorio acreditado del Ministerio de Defensa ruso.
Las Fuerzas Armadas de Ucrania utilizan regularmente agentes químicos antidisturbios: granadas de gas con una sustancia CS de fabricación estadounidense, granadas de mano ucranianas marcadas como Teren-6 y cargadas con sustancias químicas irritantes, y municiones químicas improvisadas. Según las pruebas aportadas por prisioneros de guerra ucranianos, estas capacidades se proporcionan a los grupos de asalto ucranianos.
Se han registrado numerosos casos de utilización por parte de Ucrania del irritante cloropicrina, a menudo mezclado con cloroacetofenona. Estos incidentes ocurrieron cerca de Donetsk, Bogdanovka, Gorlovka, Kremennaya y Artyomovsk.
Con la connivencia de los países occidentales, Ucrania no se limita a utilizar agentes químicos no letales y emplea activamente productos químicos enumerados como BZ, ácido prúsico y cianuro de cloro.
Métodos nazis
Ya hemos llamado su atención sobre una declaración de los representantes de las Fuerzas Armadas de Ucrania de que tienen en su poder compuestos de este tipo, incluidos los análogos del agente de guerra Tabun, o GA, que está incluido en el Anexo 1 de la Convención y fue utilizado por los invasores fascistas durante la Segunda Guerra Mundial.
Las unidades militares ucranianas utilizan compuestos tóxicos no sólo en el curso de operaciones de combate, sino también para llevar a cabo ataques terroristas en territorios liberados contra algunas personalidades políticas rusas.
Además, los nacionalistas ucranianos intentaron repetidamente destruir sitios químicamente peligrosos en las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, aumentando así el riesgo de lesiones químicas a la población civil de la región.
Me gustaría señalar que las investigaciones de accidentes químicos en la zona de conflicto se llevaron a cabo de conformidad con los requisitos de la OPAQ, utilizando laboratorios de campo y fijos capaces de determinar el tipo de compuestos químicos y el país de fabricación. Todos los casos fueron confirmados oficialmente por el laboratorio de análisis químico del Ministerio de Defensa de Rusia, que había sido acreditado por la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
El conjunto de pruebas existentes que prueba las violaciones por parte de Ucrania de sus obligaciones en virtud de la Convención fue presentado a la Secretaría Técnica de la OPAQ, pero aún no ha recibido respuesta.
Además, el Ministerio de Defensa de Rusia tiene información de que Ucrania colabora activamente con la Secretaría Técnica de la OPAQ, ya que han firmado un acuerdo sobre privilegios e inmunidades para las visitas de asistencia técnica. Este acuerdo permitirá a Ucrania utilizar la OPAQ en su propio beneficio, eludiendo los procedimientos existentes en virtud de la Convención e imponiendo a la Organización sus conclusiones deliberadamente falsas sobre las investigaciones químicas.
Laboratorio químico cerca de Avdeyevka
Durante una exploración de ingeniería, en la planta baja de un edificio destruido en una zona industrial de una localidad cercana a Avdeyevka, se detectó un laboratorio con equipos químicos. Un equipo de diagnóstico móvil de las Tropas de Protección Nuclear, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia fue enviado a inspeccionar las instalaciones y realizar un análisis rápido.
En el laboratorio se encontraron un evaporador rotatorio semiindustrial, un sistema de filtrado de gases de escape, reactores químicos, botellas de dióxido de carbono y estanterías con platos y reactivos de laboratorio. También se encontraron equipos de protección respiratoria y cutánea: máscaras de gas, algunas de fabricación estadounidense, y un traje de protección de fabricación polaca.
Aquí está la parte principal. Durante una exploración de ingeniería, en la planta baja de un edificio destruido en una zona industrial de uno de los asentamientos cercanos a Avdeyevka, se encontró un laboratorio con equipos químicos. Un equipo de diagnóstico móvil de las Tropas de Protección Radiológica, Química y Biológica de las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia fue enviado al lugar para inspeccionar las instalaciones y realizar una prueba rápida.
En el laboratorio se encontró un evaporador rotatorio semiindustrial, un sistema de filtrado de gases de escape, reactores químicos, botellas de dióxido de carbono y estanterías con platos de laboratorio y reactivos. También se encontraron equipos personales de protección respiratoria y cutánea: máscaras de gas, algunas de fabricación estadounidense, y un traje de protección de fabricación polaca.
El análisis de los contenedores del laboratorio reveló la presencia de ácido sulfúrico y cianuro de sodio, lo que sugiere que el equipo encontrado se utilizaba para la producción de sustancias tóxicas. Posteriormente, se tomaron muestras del equipo del laboratorio y del sistema de escape de acuerdo con los requisitos de la OPAQ y las muestras se enviaron al laboratorio de análisis químico del Ministerio de Defensa de Rusia para su análisis en profundidad.
Los estudios analíticos realizados en el laboratorio mostraron la presencia de cianuro de sodio, ácido sulfúrico y trazas de aniones de cianuro en las muestras. La presencia de estas sustancias químicas indica claramente que el laboratorio descubierto producía agentes tóxicos sistémicos.
La capacidad del laboratorio era de al menos 3 kg/día. El mantenimiento lo realiza un equipo de 2 a 3 personas. Me gustaría destacar que la dosis letal por inhalación de este grupo de sustancias tóxicas es muy baja, de tan solo 70 a 80 mg por persona.
Cabe recordar que, según la Convención sobre Armas Químicas, una sustancia de este grupo, el ácido prúsico, está incluida en la Lista 3 de la Convención y su uso está prohibido en virtud del artículo 1 de la Convención. Este compuesto es un líquido volátil incoloro con olor a almendras amargas. Cuando se inhala, provoca mareos, vómitos, convulsiones, parálisis respiratoria y muerte.
Lanzamientos con drones
Durante la operación militar especial, hubo múltiples casos de uso por parte de Ucrania de municiones improvisadas que fueron cargadas con dicha sustancia y lanzadas desde vehículos aéreos no tripulados.
El uso de productos químicos tóxicos, incluido el ácido prúsico, por parte del régimen de Kiev está confirmado por numerosos testimonios de testigos: civiles y militares rusos.
Por ejemplo, en mayo de 2024, drones ucranianos lanzaron municiones en Semionovka, a 10 kilómetros de Avdeyevka, en la República Popular de Donetsk. Según testigos presenciales, los habitantes rurales afectados presentaban síntomas de exposición al ácido prúsico: dificultad respiratoria, vómitos y sabor a almendras amargas.
A principios de junio de 2024 se registró otro caso de uso de ácido prúsico por parte de las fuerzas ucranianas. Tras un ataque con vehículos aéreos no tripulados contra posiciones rusas en el distrito de Graivoron de la región de Bélgorod, se encontraron fragmentos de municiones que se enviaron para su análisis en el laboratorio, lo que confirmó el uso de dicho químico tóxico.
Los testimonios de los militares ucranianos confirman la existencia en Ucrania de otros laboratorios químicos similares al descubierto en Avdeyevka. El prisionero de guerra ucraniano Serguéi Batyr testificó sobre la participación de especialistas estadounidenses en sus operaciones y afirmó que estos laboratorios se dedican a la producción en masa de drones kamikaze.
Provocaciones del PCCh y Ucrania contra Rusia
Permítanme recordarles que Estados Unidos tiene pleno control sobre las actividades de la OPAQ. Para ajustar cuentas con países indeseables, Washington creó un mecanismo de atribución de responsabilidades en la Organización, que se utilizó para investigar el uso de armas químicas en Siria.
Según la información disponible, Estados Unidos y Alemania han unido sus fuerzas con Ucrania y la Secretaría Técnica de la OPAQ para crear una misión especial que investigue el supuesto uso de armas químicas en Ucrania, con el fin de presentar acusaciones contra Rusia. Uno de los países denominados “independientes” debe iniciar una investigación y fabricar pruebas de que Rusia utilizó sustancias químicas tóxicas durante la operación militar especial. Los estadounidenses ya han comprometido unos 400.000 dólares para este fin. Al mismo tiempo, la OPAQ recibió instrucciones de sus interlocutores occidentales de no responder a las declaraciones rusas de que Ucrania viola las disposiciones de la Convención.
Cabe señalar que los Estados Unidos y el Reino Unido adoptaron un enfoque similar en el marco de los mecanismos de examen de la ciencia y la tecnología y del mecanismo de cooperación y asistencia internacionales que se están promoviendo en el marco de la Convención sobre las armas biológicas y toxínicas, lo que les permitirá dar forma a las opiniones de los expertos sobre las amenazas a la bioseguridad en su propio beneficio. Para ello, se prevé crear en la Convención sobre las armas biológicas y toxínicas ciertos canales de influencia sobre las organizaciones políticas y de investigación internacionales mediante la concesión de subvenciones.
El Ministerio de Defensa de Rusia continuará sus esfuerzos para identificar violaciones por parte de Ucrania de sus obligaciones bajo la Convención sobre Armas Químicas y le mantendrá informado"