Kathleen Van Bremp es la presidenta de la Comisión especial sobre las vacunas Covid-19 en el Parlamento Europeo, donde se sigue una investigación abierta sobre el proceso de adquisición por parte de la Comisión Europea, así como su eficacia y los daños que están reportándose en las personas inoculadas.
Durante semanas, esta Comisiónespecial ha realizado sesiones públicas para escuchar a los representantes de la industria farmacéutica, así como a los representantes de la Comisión Europea y del Tribunal de Cuentas que ha elaborado una dura auditoría en la que denuncia una gran cantidad de irregularidades en el proceso.
De hecho, ayer conocíamos que la Fiscalía Europea ha abierto una investigación sobre los procesos de adquisición de estas vacunas, sin facilitar más detalles, aludiendo al hecho de que ha informado públicamente de esta investigación ante el gran interés público suscitado.
Los eurodiputados están emitiendo, desde distintos países y grupos políticos, mensajes de alerta y denuncia ante cuestiones de gran relevancia que aluden a la falta de documentación entregada por parte de las farmacéuticas a los distintos organismos europeos, así como a la falta total de transparencia en el proceso de compra más grande, el de las vacunas de Pfizer, que fueron gestionadas de manera privada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyen.
Durante las sesiones de la Comisión especial, ha habido preguntas sobre un posible caso de corrupción, vínculos familiares de Von der Leyen con Pfizer y su eliminación de pruebas fundamentales que deberían haberse presentado en cumplimiento con la normativa europea.
La presidenta de esta comisión ha señalado a través de sus redes sociales los puntos por los que la Fiscalía de la Unión Europea debe investigar:
La eurodiputada señala lo siguiente:
"El comité COVI estará siguiendo este caso con mucha atención. Varios aspectos del tercer contrato de Pfizer merecen ser analizados, los mensajes de texto entre el presidente de la Comisión y el hecho de que no hay pruebas documentales de las negociaciones preliminares en primera instancia.
Necesitamos saber por qué el contrato más grande es el menos transparente. Necesitamos entender por qué la UE está obligada a comprar 1800 millones de vacunas de Pfizer/BioNTech, independientemente de las necesidades, independientemente de si han entrado en el mercado nuevos y mejores ofertas.
Muchos contratos de la UE reservaron un "derecho" a comprar, pero con el contrato de Pfizer tenemos una "obligación" de comprar. ¿Por qué nos desviamos muchas veces del procedimiento normal para un contrato que cubre nuestras necesidades, durante un período en el que todos ya estarían vacunados (2022 y 2023)?."