Suiza 1 – 1 Polonia (4 – 5)
Los octavos de final de la Eurocopa de Francia comenzaron con un partido donde se enfrentaban Suiza, una de las posibles outsiders del torneo, y Polonia, una selección con la posibilidad de hacer historia en el torneo si lograba su clasificación para los cuartos de final.El partido no fue bueno desde el punto de vista de la calidad pero tuvo cierta emoción. En el primer tiempo, la mayor calidad de los helvéticos brilló por su ausencia y fueron superados por el empuje de los polacos que pudieron resolver el partido en los primeros cuarenta y cinco minutos si sus delanteros hubieran estado más acertados. Precisamente, la línea atacante de Polonia es uno de sus puntos fuertes al tener entre sus seleccionados a Lewandowski, que parece que no está en el torneo, y a Milik, que está fallando lo imposible. Sin embargo, son los extremos quienes están cubriendo estas deficiencias de cara al gol de los zagueros polacos y nuevamente fue Blaszczykowski quien puso a Polonia por delante.El segundo tiempo fue para Suiza, que adelantaron líneas y tuvieron ocasiones como para terminar goleando a una Polonia que se encerró en su área ante la impotencia de poder contrarrestar el empuje helvético. No obstante, emergió la figura de Fabianski, que hizo verdaderos paradones. Los suizos continuaron en su empeño de empatar el partido y en el minuto 81 Shaqiri marcó uno de los goles de la Eurocopa con una chilena desde el borde del área que se coló pegada al palo de Fabianski. Un verdadero golazo que nos recordó aquel que Rivaldo marcó al Valencia.En la prórroga los helvéticos siguieron empujando y su delantero Derdiyok pudo cerrar el marcador pero Fabianski volvió a erigirse en héroe para provocar que el marcador no se moviera y el partido se decidiera en la tanda de penaltis.En la tanda ocurrió lo que pasa en muchas ocasiones: falló Xhaka, uno de los jugadores más técnicos y con más calidad. Polonia no erró y el jugador del Sevilla Krychowiak transformó el quinto llevando a su selección a los cuartos de final por primera vez en su historia. Suiza volvió a decepcionar en un gran torneo y seguimos esperando que hagan efectiva la gran calidad que tienen.