¿Por qué los 6.500 muertos por gripe en España duelen menos que los fallecidos por coronavirus?

03 de Abril de 2020
Actualizado el 02 de julio de 2024
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foto urgencias saturadas
A quien le toca vivir la muerte de una familiar, sea por gripe, coronavirus o cualquier otro virus o enfermera infecciosa de forma más o menos inesperada es una tragedia de enorme magnitud. Sin embargo, la situación que vivimos ante la lucha contra el coronavirus, que nos ha obligado al aislamiento por la rápida propagación del COVID-19, ha convertido en relato de terror social cada fallecimiento .Como ya adelantó diario16.com cuando empezamos a ser conscientes de la que más o menos se nos podía venir encima -aunque creo que nunca pensamos que se llegaría a tanto- la gripe mató el año pasado en España a 15.000 personas, según datos de la OMS.Como recordaba también a nuestro medio el geriatra y doctor Jesús Cuadrado, la gripe en España ha afectado a 800.000 personas el año pasado sólo en España, de esos, se han ingresado a 52.000 y de ellos han muerto 15.000. Cifras que si las hubiéramos desde los medios de comunicación retransmitido en directo y cada hora también habrían provocado mucha alarma social y angustia en la sociedad.

Relato equivocado

Así, desde la opinión pública y publicada, que ahora se echa encima del Gobierno por no disponer de personal, material y hospitales suficientes para esta pandemia, se olvida que hace apenas un mes -cuando el coronavirus nos parecía cosa de los chinos o de los italianos- las organizaciones profesionales y los sindicatos sanitarios ya denunciaba la epidemia de gripe que colapsaba las urgencias, y recordaba que en campañas anteriores había obligado a tener a pacientes en pasillos.

Aislamiento necesario

Convertirnos en un escudo humano contra el virus es el objetivo de todos, como nos repiten técnicos, desde las instituciones y los propios sanitarios a través de vídeos con mensajes maravillosos y entrañables que nos hacen tener esperanza en la humanidad.Lamentar las muertes que vivimos al minuto también. Sentir que las familias no puedan acompañar a sus mayores o enfermos con coronavirus en el hospital es muy duro y un sufrimiento que hoy siente suyo toda la gente de bien.Es cierto también que la mayor parte de los ciudadanos infectados lo están viviendo desde sus casas. Sólo se hace la prueba a personal de riesgo y pacientes más vulnerable, como las personas mayores. Es verdad. Pero antes de que el pánico se generalice es bueno recordar los datos de la epidemia de gripe cada año, con muertos incluidos. Porque lo que no se conoce, también existe. Y el proceso es muy parecido, aunque nunca nos produjera alarma social.
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