El primer ministro británico, Keir Starmer, ha anunciado hoy una asociación histórica con Ucrania que durará 100 años. Ha afirmado que Reino Unido apoyará "más allá de esta terrible guerra" al país ucraniano, y permanecerá a su lado en un futuro que ha señalado como "libre y próspero nuevamente".
El acuerdo contempla 3.000 millones de libras esterlinas para apoyar anualmente a Kiev: una ayuda que se mantendrá de manera indefinida. Además, Reino Unido intensificará el apoyo en la formación y entrenamiento de militares ucranianos, proporcionará sistemas móviles de defensa aérea, y enviará 150 cañones de artillería. “No se puede subestimar el poder de nuestras amistades de largo plazo. Apoyar a Ucrania para que se defienda de la invasión bárbara de Rusia y reconstruya un futuro próspero y soberano es vital para la base de seguridad de este gobierno y para nuestro plan de cambio”, ha dicho Starmer.
Una medida que se toma apuntando a la situación en la que se encuentra Kiev actualmente: Starmer ha reconocido que la situación actual de Ucrania es de debilidad, y que por ello, ante las posibles negociaciones, necesita tener respaldo.
Zelenskiy, por su parte, ha señalado estar en contacto con varios países europeos como Francia, Polonia y Gran Bretaña para abordar la creación de una fuerza internacional de "mantenimiento de la paz". Aunque ha explicado también que, por el momento, es demasiado pronto para dar detalles.
Ha sido en Kiev, en el primer viaje oficial como primer ministro de Reino Unido, donde Starmer ha afirmado que el acuerdo, que no tiene precedentes en la historia, refleja el "enorme afecto entre los dos países".
Mientras ambos líderes estaban conversando y sobre este pacto, según ha informado The Guardian, sobrevolaba sus cabezas un avión no tripulado de origen ruso. Se desató fuego antiaéreo para combatirlo. Según las autoridades no hubo víctimas, aunque sí hubo daños materiales causados por los restos de la aeronave. Un hecho que Starmer utilizó como recordatorio de lo que está viviendo la ciudadanía ucraniana a diario durante los últimos años.
Sobre el giro que supuestamente dará la situación del conflicto, como consecuencia de la llegada de Trump a la Casa Blanca, Starmer no quiso hacer declaraciones. Pero sí afirmó que seguirán trabajando con Estados Unidos, como han venido haciendo hasta ahora.