La Guardia Civil detuvo a tres vecinos de Paiporta, Albal y Godella el pasado martes y el miércoles, por su participación el pasado domingo en los altercados que se produjeron con la visita de las autoridades, los Reyes de España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Comunidad Valenciana, Mazón en Paiporta.
Según la información publicada, los detenidos estaban ayudando en las labores de limpieza, "y no consta que tengan antecedentes por militancia en movimientos ultras". Los detenidos, tres hombres, golpearon el vehículo donde se evacuó al presidente del Gobierno, así como al de sus escoltas. Los Reyes y el presidente de la Comunidad Valenciana permanecieron en el lugar.
Tras el análisis de los videos y las imágenes captadas en el momento de los hechos, han permitido a los agentes del Servicio de Información, identificar a los autores. El martes se detuvo al primero, vecino de Paiporta, y el miércoles, a los otros dos, residentes de Albal y Godella, respectivamente.
La investigación sigue en curso, por lo que no se descarta la identificación de más personas.
El juzgado de Torrent es el encargado de abrir procedimiento, que se está cursando en la investigación de supuestos delitos de atentado, donde se investigará el golpe por la espalda al presidente Pedro Sánchez, la herida sufrida por un escolta de Doña Letizia, desórdenes públicos y daños.
Para efectuar la detención de al menos uno de ellos, se desplazaron agentes especializados en antiterrorismo, de la Unidad Central Especial 3 (UCE3) desde Madrid. Es precisamente esta unidad la que lidera las investigaciones, al ser expertos en el ámbito de las sectas, movimientos racistas, xenófobos y antisistema.
Este desplazamiento, según ha publicado El Mundo, es considerado por sus fuentes consultadas en el propio cuerpo de la Guardia Civil como "desproporcionado". «Que se use a la UCE para esto es matar moscas a cañonazos. Es más que criticable porque con el Servicio de Información es más que suficiente», señalan.
La información publicada por Las Provincias señala que, "según las primeras investigaciones de la Guardia Civil, el lanzamiento de barro y objetos a la comitiva no habría sido una acción organizada, sino que respondería a un ataque repentino de damnificados, algunos de ellos de extrema derecha, que mostraron su indignación de una forma muy violenta".