En el debate electoral de la televisión de Galicia (TVG) celebrado el lunes por la noche, las mujeres candidatas demostraron un rendimiento destacado en comparación con sus contrincantes masculinos. Ana Pontón del BNG, Marta Lois de Sumar Galicia e Isabel Faraldo de Podemos se elevaron por encima del nivel de debate de Alfonso Rueda del Partido Popular y de José Ramón Gómez Besteiro, del PSdeG-PSOE, aunque este último también destacó por su desempeño en el debate, sumándose a la crítica hacia Rueda.
Las tres candidatas pusieron en aprietos al candidato a la Xunta del Partido Popular, Alfonso Rueda, en una serie de temas clave. La política fiscal, la crisis de Alcoa, la política energética, el desempleo y la emigración, junto con la gestión de la AP-9, fueron algunos de los asuntos que centraron el debate. Rueda, cuando se veía acorralado, optaba por desviar la atención hacia temas como Cataluña y la amnistía, estrategia que se ha convertido en un patrón para el Partido Popular cuando se siente presionado.
En un momento de absoluto desconcierto, Rueda intentó atacar a la candidata del BNG, Ana Pontón, relacionándola con ETA, una táctica difamatoria y de una bajeza moral solo digna de un discípulo de Feijóo y que ha sido empleada por el Partido Popular en multitud de ocasiones. Estos ataques infundados y desviaciones del debate hacia cuestiones ajenas a Galicia no contribuyen a un diálogo político constructivo ni al desarrollo democrático.
Las mujeres candidatas a presidir la Xunta de Galicia
El debate dejó claro que las mujeres candidatas estaban en la vanguardia, cuestionando y confrontando a sus contrincantes masculinos en temas cruciales para el territorio. La insistencia del Partido Popular en recurrir a temas ajenos a Galicia, como Cataluña o ETA, refleja una tendencia a desviar la atención de los problemas y desafíos específicos de la región. En lugar de abordar los problemas reales que preocupan a los gallegos, Rueda optó por una estrategia de confrontación y desinformación, lo que puede alejar a los votantes que buscan soluciones concretas a los desafíos que enfrenta Galicia.
Por otro lado, José Ramón Gómez Besteiro del PSdeG-PSOE, aunque compitiendo con un tono menos confrontativo que algunas de sus contrapartes, destacó en el debate al criticar con contundencia la gestión de Rueda y el Partido Popular. Besteiro remarcó que es necesario "gestionar mejor" y reprochó que los populares siempre buscan excusas y culpan a otros. También mencionó la subida del salario mínimo interprofesional que se aprobará hoy, señalando los logros del Gobierno central encabezado por Pedro Sánchez. Este enfoque apuntaló su posición en el debate y añadió un contraste sustancial al desempeño de Rueda.
Sanidad precaria en Galicia
Además, el debate resaltó la preocupación por la Sanidad precaria y privatizada en Galicia. Este tema protagonizó momentos tensos, en los cuales Alfonso Rueda no logró salir victorioso o, posiblemente, no pudo hacerlo por falta de argumentos sólidos. Los representantes de los partidos progresistas destacaron la necesidad de abordar este problema de manera urgente y poner fin a las políticas de privatización y continuismo impulsadas durante las legislaturas del Partido Popular con Feijóo al frente.
El debate electoral en Galicia subrayó la destacada actuación de las candidatas femeninas, la crítica hacia Alfonso Rueda y las políticas de privatización y continuismo de Feijóo, así como la urgente necesidad de abordar la Sanidad precaria en la comunidad.
Los representantes de los partidos progresistas enfatizaron las necesidades de los gallegos y la precariedad que ha surgido como resultado de las políticas pasadas. Alfonso Rueda y su enfoque en desviar la atención de los problemas centrales de Galicia hacia Cataluña y la Amnistía se posicionaron como perdedores claros en este debate