Isabel Díaz Ayuso es una defensora a ultranza del mantra neoliberal de que no hay que pagar impuestos, sobre todo de las grandes empresas y de los millonarios. Estas políticas tienen unas consecuencias gravísimas para la ciudadanía, sobre todo para las familias de las clases medias y trabajadoras.
Según un informe de la organización internacional Tax Justice Network, al que Diario16 ha tenido acceso, al menos un 25% en impuestos que las multinacionales han dejado de pagar a través del uso de paraísos fiscales podrían recuperarse si se publicaran datos que los gobiernos mantienen ocultos desde al menos 2016.
Una restricción a unas medidas de transparencia fiscal adoptadas hace un tiempo ha presionado a los gobiernos a mantener en el anonimato las identidades de las empresas multinacionales que confiesan haber trasladado sus beneficios a los paraísos fiscales, lo cual está provocando que los gobiernos renuncien cada año a una recaudación de, al menos, 89.000 millones de dólares que las grandes corporaciones deberían haber pagado por concepto del impuesto de sociedades.
En un momento en que las personas y las economías de todo el mundo sienten la presión de la crisis mundial del coste de la vida, los gobiernos están obligados a dejar de encubrir a los evasores y elusores del impuesto de sociedades y, en consecuencia, recuperar el dinero público que se necesitan con urgencia.
En este aspecto, el papel de la OCDE es crucial, dado que es, además de un club de miembros de los países ricos, el principal organismo mundial de elaboración de normas sobre la fiscalidad mundial.
El G20 encargó a la OCDE en 2013 la elaboración de una norma internacional para la presentación de informes país por país. Sin embargo, en lugar de exigir a las empresas multinacionales que hicieran públicos sus informes país por país —lo que habría expuesto públicamente a cualquier empresa multinacional que trasladara sus beneficios a los paraísos fiscales —, la OCDE permitió a estas grandes corporaciones revelar sus informes de forma privada a sus gobiernos, que a su vez, están obligados a anonimizar los informes antes de compartirlos con la OCDE, quien luego agregaría y compartiría los datos con el público.
A día de hoy, cerca de 50 países han recogido de forma privada más de 15.000 informes por país de empresas multinacionales. Hasta ahora, la OCDE solo ha publicado agregados anonimizados de estos informes en dos ocasiones, en 2020 para los datos recogidos en 2016 y en 2021 para los de 2017. La OCDE no publicó la última serie de datos anonimizados en julio de este año, que habría comprendido datos recogidos en 2018.
Según estos datos anónimos de la OCDE de años anteriores,los gobiernos de todo el mundo perdieron 312.000 millones de dólares en impuestos en un solo año por culpa de las empresas multinacionales que trasladaron sus beneficios a los paraísos fiscales. Pero el carácter anónimo de los datos impedía identificar a las empresas multinacionales que trasladaban sus beneficios y, por tanto, pagaban menos impuestos.
En este sentido, no se puede olvidar cómo Ferrovial, empresa con domicilio fiscal en Madrid, huyó recientemente al paraíso fiscal de Países Bajos. Isabel Díaz Ayuso defendió a la empresa constructora y culpó de su traición a España a las políticas fiscales del gobierno central.