Ayuso tiene el arma para derribar a Sánchez

17 de Junio de 2024
Guardar
Sanchez Ayuso Arma

Tal y como analizamos en Diario16, Pedro Sánchez no puede estar ni un minuto más en la Presidencia del Gobierno. No se trata sólo de los presuntos casos de corrupción, tráfico de influencias (no sólo Begoña Gómez, hay otros más), sino del fracaso absoluto de sus políticas sociales que están llevando a España a liderar el ranking europeo de pobreza, tal y como indicó la Unión Europea en su último informe. Esos datos crueles corroboran las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística, la Seguridad Social y el Servicio Público de Empleo Estatal.

La Presidencia de Pedro Sánchez se sustenta en generar dolor a las familias de clase media y trabajadora, además de pagarla con cientos de miles de millones de euros con el dinero de todos los españoles. La infamia nunca había llegado tan lejos.

El nuevo pago que hará el gobierno de Pedro Sánchez para mantenerse en la Presidencia será la aprobación de un tratamiento singular en materia de financiación para Cataluña. Esto se suma a los más de 166.000 millones de euros que va a costar a los españoles que Sánchez fuera investido presidente del Gobierno.

La nueva locura de Sánchez para obtener rédito político ha encontrado la oposición absoluta de las comunidades autónomas, no sólo las gobernadas por el Partido Popular, sino también en algunas que tradicionalmente son socialistas.

Varias federaciones del PSOE han mostrado este fin de semana su oposición absoluta a la deriva de Pedro Sánchez. Como no podía ser de otro modo, el más duro ha sido Emiliano García-Page, el único presidente autonómico con mayoría absoluta que le queda al PSOE. El tratamiento singular en materia de financiación para Cataluña ha sido definido por Page como «un precio demasiado caro por mantener un puesto».

Sin embargo, el presidente castellanomanchego fue más allá al mostrar a Sánchez que los progresistas deben demostrar que lo son luchando por la igualdad y colocándose en contra de los privilegios. «No cuela llamar singularidad cuando lo que buscan son privilegios», además de señalar que es bastante duro «ver cómo se erosionan valores progresistas y se ponen en cuestión o se disimulan, como para que encima el principal valor que es la igualdad se vaya a pisotear. A ver si va a resultar que los que nos tomamos en serio la autonomía vamos a tener que renunciar por una cuestión de supervivencia en el Congreso de los Diputados. Ahí es donde se necesita un hospital para la supervivencia pero, ese hospital de campaña no puede costar más que la sanidad de verdad».

Por su parte, el PSOE de Extremadura advirtió a Sánchez que no tolerará chantajes en la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica. «Los hechos o cuestiones singulares no pueden bajo ningún concepto suponer diferencias entre españoles. La negociación nunca podrá servir para enfrentar territorios. El modelo al que aspiran los socialistas es a uno que permita mantener los servicios públicos de calidad, basado en la igualdad, la justicia social y la solidaridad. Lo que no puede permitir el PSOE de Extremadura es que la negociación de la financiación autonómica se utilice como moneda de cambio en las negociaciones que se emprendan en los territorios», afirmaron los socialistas extremeños a través de una comunicación a los medios.

Por su parte, en Andalucía, como no podía ser de otro modo, han mostrado una postura frente al nuevo atentado de Sánchez contra la igualdad territorial en la que, incluso, dejan caer un pacto con el Partido Popular para defender un modelo de financiación sin privilegios.

«No aceptamos ninguna financiación que perjudique a Andalucía y emplazamos a Moreno, una vez más, a sentarse con Espadas para acordar un modelo bueno para Andalucía y que podamos defender con el resto», ha declarado Josele Aguilar, portavoz adjunto del PSOE-A.

Sin embargo, el arma más poderosa la tiene Isabel Díaz Ayuso y, de utilizarla, derribará sin contemplaciones a Pedro Sánchez, algo que decenas de millones de españoles están esperando. No se trata de hacer caer al gobierno, sólo a un presidente al que le preocupa más su marketing, su imagen, su propaganda y su supervivencia que los problemas reales de la ciudadanía. Lo ha demostrado con creces desde las elecciones de 2023, donde ha convertido la mentira (encapsulada en el eufemismo de «cambios de opinión») en su modo de actuar, cayendo en una mitomanía crónica.

Ayuso, durante una intervención en Cataluña en la que la criticaron por su injusto sistema de dumping fiscal, afirmó que en vez de criticarlo, que lo aplicaran en ese territorio.

La presidenta madrileña no tiene más que declarar la independencia fiscal de la Comunidad de Madrid respecto al sistema de financiación autonómica en el momento en que Sánchez aprobara el tratamiento singular para Cataluña. La presión que se generaría sobre Pedro Sánchez sería insoportable, aunque, evidentemente, nadie como él le ha dado más sentido a la palabra «atornillamiento».

Ayuso no sería la primera presidenta de Madrid en atacar el sistema de financiación autonómica. Ya lo hizo Cristina Cifuentes cuando denunció que los madrileños recibían 229 euros menos por persona que el resto de los españoles.

El manual de resistencia de Pedro Sánchez ha pasado de ser un mal libro a una chequera en la que se utilizan los fondos públicos y europeos para cumplir con los objetivos personales y políticos de una persona. La investidura ya costó 166.000 millones, ahora las comunidades autónomas van a perder capacidad de financiación. Sin embargo, en la izquierda aún hay personas que cualquier precio es poco para mantener a este hombre en la Presidencia del Gobierno.

Lo + leído