Fue Fernando Alonso el primer piloto en proclamar, desde su autoridad y experiencia, y afirmó qué George Russell era un grande.
Hoy lo ha demostrado. Han demostrado los dos ser grandes, muy grandes:
Fernando Alonso y George Russell.
Fernando Alonso y su china en el zapato predilecta, el ínclito Sebastian Vettel, quien ayer involuntariamente le arruinó la vuelta que le habría colocado entre los 10 primeros sin ningún problema. Lo tenía muy complicado hoy, y eran muy importantes los puntos para Alonso, para su equipo y para su propia alma.
Lástima que el duelo entre Russell y Alonso no hubiese sido por la novena posición, entonces habría dado más igual el resultado.
Fuimos los primeros en decir que Fernando Alonso no se iba a ir de la Fórmula 1 definitivamente, fuimos la inspiración del HASTA LUEGO.
Naturalmente queríamos que Fernando Alonso consiguiese ese punto en el Gran Premio de Austria, ese décimo puesto. Pero al mismo tiempo, casi con la misma intensidad, con el mismo corazón, queríamos ese punto para George Russell, porque iba a ser el primero para Williams en mucho tiempo, iba a ser el primero que iba a conseguir George Russell para la escudería en la que corre oficialmente durante toda su historia.
Ambos lo merecían. Ambos. Así que estamos contentos y estamos tristes. Y tristes y contentos. En cualquier orden. Da igual. Sentimientos encontrados.
Dos pilotos magníficos.
Hemos ganado todos: viéndolos competir. Para ambos lo mejor de nuestra energía y un largo y cerradísimo aplauso.
Tigre Tigre