Aún queda la carrera del domingo…, pero casi ni siquiera, porque -salvo error o cataclismo- en el viejo Circo de la Fórmula1 ya están todos los “Zapatos de payaso” vendidos.
Si hubiesen quedado Sainz y su compañero en Ferrari, el Carlitos monegasco, primero y segundo, y los McLaren detrás, las espadas seguirían en lo alto respecto al Campeonato de Constructores y no habría sido tan incontestable la sensación de que ESTO SE ACABA.
Hamilton tristísimo. El gran Checo aguantando el tipo. Alonso impresionante. Norris otra vez en la pole… aunque no suele ser capaz de sacarle partido a lo salir el primero. Hülkenberg pasa a Sauber que ya está a un paso de convertirse en Audi F1. Y Sainz…. Si Sainz ganase en Abu Dhabi, sería una fiesta pero también sería otro gran “jarro de lágrimas” para este final de temporadas tristísimo.
-Me sacáis de una escudería donde lo he hecho magnífico (EN VERDAD EN TODAS LO HA HECHO MAGNÍFICO) para meter a un tío al que está derrotando su compañero de equipo y que hasta confiesa que ha perdido la velocidad en clasificación.
Para mayor abundamiento, y que la carrera de Yves Marina 2024 se esté presentando como si fuera una suerte de velatorio, los “iluminaos de la FIA” han recortado la zona de DRS en 50 metros para que sea aún más difícil adelantar en un circuito en el que -excepto una vez- no hay nada que hacer si no sale en las primeras posiciones. Si mal no recuerdo en las últimas nueve ediciones ha ganado el poleman; aunque da igual si me equivoco da igual porque aquí de lo que se trata es de estar tristísimo como todo el mundo, Lobato y Cuquerella incluidos (y eso que son los animadores del circo).
¡Me rebelo! En la F1 nunca se sabe. ¿Y si se estrellan los McLaren entre ellos, gana Sainz, Hamilton decide retirarse de repente y Ferrari tiene que ponerse de rodillas ante Carlos Sainz Hijo?
En Fórmula 1 el misterio siempre está vivo.
Tigre Tigre