Después de su hazaña en el circuito de Suzuka, Japón, el mundo entero esperaban nuevos milagros de Max Verstappen.
Como saben todos los aficionados, e incluso los medios aficionados, el gran Max consiguió no sólo la pole en Japón sino que ganó la carrera con un coche teóricamente inferior; aunque esto último es algo que discute y duda Lando Norris, su único teórico rival el año pasado por el Mundial y que en esta temporada aún lidera a la clasificación. Y decimos aún, porque si su compañero Óscar sigue así, Lando -Blando- Norris acabará convirtiéndose en el segundo piloto de McLaren.
Pero volvamos a Bahrein. Ha sido una carrera muy entretenida. Para el espectador y también para algunos pilotos, entre los que desgraciadamente no se cuentan ninguno de los dos españoles. Carlos Sainz tuvo que abandonar tras sufrir la embestida del compañero de Verstappen en Red Bull, Yuki Tsunoda, y la carrera de Fernando Alonso... mejor olvidarla.
Pero hubo sus luchas, y en especial los Ferrari que emplearon una estrategia distinta a casi todos los demás equipos, lograron animar la segunda parte de la prueba, aunque ninguno de los dos consiguió llegar al podium. Y el pobre Hamilton volvió a quedarse toda la carrera viendo el culo de Charles Leclerc. Curioso que la afición le nombrase piloto del día: a Hamilton.
Piloto del día, en nuestra opinión tenía que haber sido Dios Russell, alias George, cuyo coche parecía un fantasma en las pantallas de seguimiento pues aparecía y desaparecía de la clasificación, y que con un coche que hacía aguas por todas partes y con los neumáticos mucho más que gastados, fue capaz de aguantar las embestidas del actual líder del mundial, el ya citado más arriba "Blando" Norris.
Y también se habría merecido ser nominado como piloto del día Max Verstappen, que con un coche que parecía una patata con ruedas, al que le hicieron un pit stop desastroso, consiguió en la última vuelta, como en las carreras antiguas de la época del Marqués de portago y Fangio, adelantar a su antiguo compañero de escudería y actual primer piloto de Alpine: Pierre Gasly.
Quedó sexto Verstappen, pero en verdad en verdad le sentó mucho mejor, se sintió más orgulloso de sí mismo, que cuando en 2023 ganaba carrera tras carrera sin despeinarse debido a la insultante superioridad de su monoplaza.
La Fórmula 1 está más viva que nunca, en Liberty Media han hecho los deberes, y está la afición del mundo entero salivando y con el pensamiento ya puesto en el próximo fin de semana, en el quinto Gran Premio de la temporada, el de Arabia Saudita.
¿Quedará Max Verstappen otra vez sexto? ¿Conseguirá George Russell vencer a los Maclaren? ¿Lloverá sobre las arenas del desierto?
Todo es posible en el Gran Circo de la Fórmula 1. El mundo entero está comprando palomitas y mirando atento.
Tigre Tigre