Quizá el circuito más peligroso del mundo. Arabia Saudita. Jeddah. Nadie puede garantizar que no acabará antes o después contra el muro. Le pasó al propio Verstappen en 2021. Y le ha pasado lo mismo al actual líder del mundial, Lando Norris, que normalmente perderá su liderazgo al término del Gran Premio de Arabia Saudita. Y eso significa que muy posiblemente el nuevo líder será una vez más el gran Max Verstappen.
Es alucinante este chaval. En teoría no tiene coche. Y en la práctica le ha sacado nada menos que un segundo a su compañero de equipo, Yuki Tsunoda, que empieza a comprender la realidad, y ya no piensa que Checo Pérez o Daniel Ricciardo sean pilotos peores que él. Todos ellos son en verdad muy buenos, pero lo de Verstappen es de otra galaxia.... Ni el Halcón Milenario con Hans Solo a los mandos podría hacerle sombra.
Una centésima, menos que un parpadeo, ha sacado el holandés al segundo piloto de McLaren: Óscar Piastri. Decimos segundo piloto con cierta ironía porque es casi seguro que también va a salir del Gran Premio de Arabia Saudita por delante de su compañero en la clasificación del Mundial.
Más Max que nunca, parece evidente que Verstappen no tiene el mejor coche de la parrilla ni mucho menos... Y ni falta que le hace, tal como está demostrando.
Es la segunda pole position que consigue esta temporada, y si ganase la carrera el holandés quedando Piastri segundo se colocaría líder del mundial con 94 puntos, contra los 92 que sumaría el australiano. Y Norris, excepto gran milagro, a verlas venir, dejarlas pasar... y si le cae la previsible lluvia dorada encima, decir que llueve.
¡A por el quinto título mundial consecutivo!
Y Alcaraz a por su primer Godó y acercándose de nuevo a número 1 de la ATP.
No hay palabras y sólo queda aplaudir por tanto talento y disfrutar de amy gestas.
Añadir que en el caso del holandés la secreta y reciente paternidad está sirviendo de poción mágica para convertir en aún más desmesuradas sus cualidades imposibles.
Todo el mundo calladito, y a mirar. Y desde aquí, humilde y casi religiosamente, ante ambos nos quitamos el sombrero.
Tigre Tigre