Iberdrola ha recibido la autorización de la Agencia Federal Marítima e Hidrográfica (BSH) alemana para su parque eólico marino Windanker. De este modo, la compañía finaliza el proceso de aprobación de su nuevo parque en el mar Báltico alemán, que contará con 21 aerogeneradores con una potencia individual de alrededor de 15 MW.
Cuando entre en operación, en 2026, Windanker que supondrá un volumen de inversión de 1.000 millones de euros, tendrá una capacidad instalada de 315 megavatios (MW), lo que corresponde al suministro de 315.000 hogares, equivalente a una población mayor a la de la ciudad de Sevilla.
Los cimientos del parque eólico marino comenzarán a construirse este mismo verano. Este mismo año también se iniciará la instalación del cableado interno del parque. Actualmente, la compañía española Windar está fabricando las 21 estructuras de cimentación (monopilotes y piezas de transición. Mientras que Siemens Gamesa será la empresa encargada de construir los aerogeneradores.
El parque eólico marino de Windanker es un elemento clave en la estrategia de crecimiento integrado que Iberdrola está llevando a cabo en Alemania. La compañía cuenta con otros dos parques en el Mar Bálticos: Wikinger, con 350 MW, y Baltic Eagle, con 476 MW. En conjunto, los tres tendrán una capacidad de 1,1 GW y supondrán inversiones alrededor de 3.700 millones de euros.
Gracias a su amplia experiencia en el Mar Báltico y al uso de la última tecnología eólica marina, Iberdrola puede operar Windanker de forma aún más eficiente. Ya existen acuerdos de compra de energía (PPA) con clientes industriales y comerciales para su electricidad generada. El pasado diciembre, la compañía dio a conocer su acuerdo con la empresa energética japonesa Kansai, con el que, con un 51%, Iberdrola mantiene la mayoría en esta asociación, y Kansai el 49%.