Muertes silenciosas en el trabajo: Madrid reduce accidentes, pero suben los fallecimientos

Infartos, golpes de calor y patologías no traumáticas se convierten en los riesgos más mortales para los trabajadores

25 de Agosto de 2025
Actualizado a las 12:29h
Guardar
Ola-de-calor-madrid

La Comunidad de Madrid vive una situación inquietante: aunque los accidentes de trabajo bajan, los fallecimientos continúan aumentando. Cada año se registran entre 12 y 15 muertes más, según denuncian los sindicatos, y las causas de estos decesos han cambiado radicalmente. Ya no se trata solo de caídas o atrapamientos, sino de infartos, golpes de calor y otras patologías que suelen pasar desapercibidas hasta que es demasiado tarde.

La cifra que preocupa

En 2023, se contabilizó 73 muertes laborales en Madrid, cifra que ascendió a 85 en 2024, un incremento del 16%. Los primeros seis meses de 2025 suman ya 49 fallecimientos, lo que apunta a un total de 98 si la tendencia continúa, otro aumento del 15%.

Pedro Fuentes Tejero, secretario de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT Madrid, advierte: “El principal enemigo ya no es la maquinaria ni los andamios. Los golpes de calor, los infartos y los ictus se han convertido en los riesgos más graves, sobre todo para trabajadores mayores de 50 años”.

Los datos oficiales del Ministerio de Trabajo difieren, ya que consideran únicamente los accidentes ocurridos durante la jornada laboral. Los sindicatos, sin embargo, incluyen muertes “in itinere” y patologías no traumáticas, lo que explica la diferencia de cifras.

Un perfil de riesgo diferente

El envejecimiento de las plantillas y la exposición al calor son factores que explican el cambio en el perfil de los accidentes mortales. El 35 % de los trabajadores madrileños tiene más de 50 años, un grupo especialmente vulnerable a infartos y derrames cerebrales.

El caso de un trabajador de 63 años, lo ilustra claramente. En junio de 2025, murió de un infarto mientras descansaba brevemente en el baño. La inspección de trabajo constató la falta de ventilación, ausencia de zonas de sombra y la inexistencia de pausas regladas para hidratarse, mientras la temperatura superaba los 36 grados. La empresa fue sancionada con hasta 50.000 euros.

Pedro Bas, delegado de prevención de Comisiones Obreras, destaca: “Detectar estas muertes por calor es complicado y a menudo se contabilizan en otras estadísticas. Muchos casos quedan invisibilizados”.

Patricia Ruiz, responsable de Salud Laboral de UGT Confederal, añade: “Ni los datos oficiales ni los medios reflejan la realidad. Muchos trabajadores sufren patologías relacionadas con el calor que no se registran oficialmente”.

La tormenta perfecta: envejecimiento y falta de prevención

El aumento de las muertes laborales responde a una combinación peligrosa: plantillas envejecidas, falta de medidas preventivas y escasez de inspecciones. Carlos Giménez, secretario de Salud Laboral de Comisiones Obreras en Madrid, explica: “Los infartos y derrames están subiendo de forma alarmante, especialmente en el sector servicios. La edad avanzada de la plantilla y la poca atención a la salud de los trabajadores antes de contratarlos agravan la situación”.

Los sindicatos denuncian que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales aún no se aplica de forma efectiva en microempresas ni en subcontratas, y que faltan recursos preventivos en las tareas más peligrosas.

Accidentes mortales en cifras

En julio de 2025 se registraron 6 accidentes laborales mortales: 2 en Industria, 1 en Construcción y 3 en Servicios. Entre estos últimos, 2 fueron por patologías no traumáticas, como infartos o derrames cerebrales, y 1 por accidente de tráfico laboral.

El total de accidentes en ese mes fue de 7.812, de los cuales 6.515 ocurrieron en jornada laboral y 1.297 “in itinere”. Aunque los accidentes totales bajaron un 3,65 % respecto a julio de 2024, las muertes no muestran mejoría.

Pedro Fuentes Tejero subraya: Hasta julio, 49 personas han perdido la vida mientras trabajaban. Cada cifra representa un trabajador que no regresó a casa y familias que sufren su pérdida. No podemos permitir que las muertes silenciosas pasen desapercibidas”.

Calor, un enemigo invisible

Las olas de calor agravan los riesgos laborales. Los sindicatos recuerdan que las empresas deben evaluar los riesgos meteorológicos, adaptando horarios y condiciones de trabajo según la intensidad del fenómeno, y proteger a los trabajadores sin que ello afecte su salario.

El calor extremo se convierte en un riesgo laboral crítico, especialmente para trabajadores mayores o con patologías preexistentes. Según los sindicatos, 24 trabajadores han fallecido hasta julio de 2025 por patologías no traumáticas, frente a 21 en el mismo período de 2024.

Madrid, entre las comunidades más afectadas

A nivel nacional, los fallecimientos laborales han descendido un 2,3 % entre enero y mayo de 2025, pero Madrid sigue entre las tres comunidades con más muertes. La región cuenta con un inspector laboral por cada 20.000 trabajadores, muy por debajo de la ratio recomendada por la Organización Internacional del Trabajo, lo que dificulta la supervisión y control.

Fuentes Tejero concluye: “El envejecimiento de las plantillas, la escasez de inspecciones y la falta de prevención son una combinación mortal. Es hora de actuar para salvar vidas, no solo para contabilizar accidentes”.

Lo + leído