El mercado laboral español ha cerrado el mes de julio con un hito significativo: el desempleo registró un descenso de 1.357 personas, situando el número total de parados en 2.747.753. Esta cifra, publicada por el Ministerio de Trabajo, representa la más baja para un mes de julio en los últimos 18 años, según datos recogidos por Europa Press, confirmando una tendencia positiva sostenida.
La reducción del paro fue impulsada principalmente por el dinamismo del sector servicios, que redujo su desempleo en 13.390 personas, consolidándose como el motor de la economía. También contribuyeron a esta mejora la agricultura, con 2.470 desempleados menos, y la industria, que registró un descenso de 1.340 personas. En contraste, el sector de la construcción experimentó un aumento estacional en su cifra de parados, sumando 15.843 personas más, un comportamiento atribuible en parte a la pausa veraniega en muchas obras.
Este dato mensual se enmarca en un contexto anual robusto. En los últimos doce meses, el paro ha acumulado una caída de 224.800 personas, lo que supone un descenso interanual del 7,56%. En paralelo, la Seguridad Social alcanzó en julio un récord histórico de afiliados, superando por primera vez los 21,5 millones de cotizantes, con un incremento mensual de 68.074 personas.
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha destacado el momento excepcional del empleo en España, afirmando que "España está batiendo récords de ocupación" y subrayando que "el empleo está creciendo con derechos y salarios dignos". Resaltó especialmente la notable reducción del paro femenino, con 9.125 mujeres menos en desempleo, y la caída interanual del paro juvenil, que se situó en un 5,8%.
A pesar del optimismo que generan estas cifras, los expertos advierten sobre la influencia de la estacionalidad turística en los datos de verano. El verdadero desafío, señalan, radica en consolidar esta tendencia más allá de los meses estivales y abordar problemas estructurales como la temporalidad en ciertos sectores y la necesidad de adaptar la formación a los empleos emergentes. El comportamiento del sector construcción, aunque esperado en julio, también merece seguimiento en los próximos meses.
En definitiva, España culmina julio con el mejor registro de desempleo para este mes desde 2007, respaldado por máximos históricos en afiliación a la Seguridad Social. Estos indicadores reflejan una notable fortaleza del mercado laboral, aunque el camino hacia la estabilidad plena y la mejora de la calidad del empleo sigue exigiendo atención constante y políticas activas.