Tras la escandalosa resolución del Popular, el TCE reclama el acceso a la documentación del BCE

La resolución del Banco Popular está plagada de irregularidades legales que van en contra de los propios reglamentos y directivas europeas. Una de las causas de esto lo tenemos en la propia opacidad de los organismos económicos europeos a la hora de exponer sus procedimientos de un modo transparente. De ahí que nos encontráramos a un banco que superó sin ningún tipo de problemas los test de estrés en 2016, y, en menos de un año, fuera intervenido por un problema de liquidez y al que se le aplicó un mecanismo de resolución que estaba pensado para entidades con problemas de solvencia.El problema del Banco Central Europeo de Luis de Guindos es que no permite que sus cuentas internas sean investigadas y auditadas por el Tribunal de Cuentas Europeo (TCE) y sí por las empresas que forman el llamado Big Four: PwC, Deloitte, KPMG y Ernst & Young.En una carta al Parlamento Europeo, los auditores expresan su preocupación por el hecho de que la posición actual del BCE de Luis de Guindos con respecto al acceso a documentos e información les impide realizar su trabajo de manera adecuada. La supervisión bancaria conlleva riesgos significativos para la cartera pública, pero los auditores de la UE no estarán en condiciones de realizar una auditoría adecuada de estas actividades a menos que el BCE ajuste su postura con respecto a los derechos de acceso.«Es esencial que tengamos plenos poderes para auditar las actividades de supervisión del BCE. Esto es particularmente importante dados los altos riesgos para los fondos públicos por fallas bancarias y la complejidad de los nuevos mecanismos de supervisión», dijo Klaus-Heiner Lehne, el presidente del Tribunal de Cuentas Europeo.En tres ocasiones se les ha negado el acceso a información importante. Su auditoría de 2016 del Mecanismo Único de Supervisión (MUS) enfrentó serias dificultades para obtener evidencia de auditoría. Durante el trabajo en su informe especial de 2017 sobre la Junta Única de Resolución, la JUR insistió en eliminar cualquier información proveniente del BCE. En enero de 2018, cuando los auditores informaron sobre la función de gestión de crisis del BCE en relación con la supervisión bancaria, el BCE volvió a negar el acceso a los documentos necesarios para llevar a cabo el trabajo de auditoría tal como estaba inicialmente previsto.Por tanto, si los organismos dependientes del BCE no son transparentes ni siquiera para que sus cuentas sean auditadas, ¿cómo lo van a ser con los afectados del Banco Popular? Esta petición del Tribunal de Cuentas, además, tiene importancia porque es una demostración clara de que las instituciones económicas europeas están realizando una gestión adecuada para los intereses de la gran banca olvidándose de los de los pequeños accionistas de esas entidades.Por otro lado, la petición del Tribunal de Cuentas debe hacerse extensiva tanto a los afectados como a los despachos de abogados independientes y sin conflicto de intereses con el Santander que llevan luchando por acceder a documentación crucial y que le es negada constantemente por los organismos económicos europeos. https://diario16.com/angel-ron-recurre-expediente-la-cnmv-ante-la-audiencia-nacional/