La actual presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, señaló ayer jueves que «es posible que la candidatura de Kiev a la UE permanezca estancada» hasta que tengan lugar las próximas elecciones europeas, que está previsto se celebren en el mes de junio.
Según Von der Leyen, su mejor vaticinio es este, y no considera que el debate pueda darse hasta entonces, de cara al verano.
Cabe señalar que este debate se puso sobre la mesa de los 27 a finales de 2023, cuando Hungría manifestó abiertamente su reticencia ante la entrada de Kiev por la vía rápida, señalando que durante el conflicto vigente es contrario a las normas abordar esta cuestión. Además, los retos a los que se enfrentará Ucrania cuando el conflicto armado termine, son muchos, sobre todo en materia de corrupción, algo que desde el propio ejecutivo europeo se ha señalado en no pocas ocasiones.
Con este anuncio, que se suma al freno de la entrada de Ucrania en la OTAN, cada vez más difuso y lejano, se frenan las aspiraciones de Kiev para sumarse al proyecto europeo. Además, llega en un momento en el que los países de la UE, como Polonia, están cerrando las fronteras a través de protestas de los agricultores ante la entrada de productos agrícolas procedentes de Ucrania.
Las denuncias del sector agrario de distintos países apuntan, precisamente, a las concesiones hechas a los productos de Ucrania, que han generado una «competencia» desleal, según han denunciado los distintos productores europeos.
