Una investigación llevada a cabo por el New York Times, apunta que las pruebas analizadas sirven para considerar que las fuerzas ucranianas fueron responsables de un mortal ataque con misiles en un mercado de Donbass, el mismo día en que el Secretario de Estado, Antony Blinken visitaba el país por sorpresa.
Fue el 6 de septiembre en Konstantinovka, ciudad de la región del Donbass, donde se asesinó a 15 civiles y resultaron heridas decenas de personas.
En ese mimsmo momento, el presidente de Ucrania, Zelenksiy, afirmó sin dudar que el ataque provenía de las tropas rusas, y tanto gobiernos como medios de comunicación apoyaron esta versión de los hechos sin que fueran esclarecidos.
Associated Press tituló: «Zelenskiy asegura que el ataque ruso al mercado fue deliberado«. En La Sexta Noticias, el titular fue «Al menos 17 muertos en un ataque ruso sobre un mercado en Kostantinovka, en Donetsk»
El New York Times, sin embargo, asegura ahora que las evidencias apuntan a un «trágico percance» que involucró a un misil antiaéreo Buk ucraniano que, aparentemente, se habría desviado de su rumbo. Mediante el análisis de fragmentos del misil, imágenes satélite, relatos de testigos y publicaciones en redes sociales, han llegado a la conclusión que tumba las afirmaciones que se hicieron en un primer momento. Además, ha añadido el diario norteamericano que «las autoridades ucranianas han impedido a los periodistas acceder al lugar del impacto».
Según apunta el NYT, el misil fue uno de los dos disparados por las fuerzas ucranianas desde las afueras de la ciudad de Druzhkovka, a unos 15 kilómetros al noroeste de Konstantinovka. El proyectil probablemente era un modelo 9M38 utilizado por el sistema Buk, concluyó el periódico basándose en pruebas forenses.
“¿Para qué sería necesaria una investigación si todo es obvio para nosotros?” dijo a los medios en ese momento el principal asesor de Zelensky, Mikhail Podoliak. Calificó cualquier otro escenario, incluido un error ucraniano, de “ridículo”.
Por su parte, el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, se refirió a estos hechos en su discurso de la semana pasada, sugiriendo que Kiev pudo haberlo orquestado deliberadamente para que coincidiera con la visita de Blinken. Añadió que como la evidencia contradice claramente la acusación de Zelensky, “el régimen de Kiev y sus patrocinadores están tratando de silenciar esta historia y mantenerla fuera del radar”.
