El pasado jueves, el gobierno de Australia promulgó una ley que impondrá el cumplimiento obligatorio de sentencias condenatorias de, al menos, un año de prisión, para quienes hagan muestra de símbolos de odio o saludos "nazis".
Las autoridades han afirmado que la actualización de la ley tiene como objetivo abordar el aumento del odio y los comportamientos extremistas en el país. Sin embargo, ha suscitado un debate inmediato sobre la libertad de expresión y la forma de controlarla a través de medidas punitivas.
Durante los últimos tiempos se han venido produciendo de manera reiterada ataques de tinte antisemita, donde se incluyen pintadas con simbología nazi en lugares de culto e interés para los judíos.
Los expertos legales han señalado que la legislación incluye disposiciones para equilibrar la aplicación de la ley con la protección de la libertad de expresión. La ley especifica que está prohibido exhibir símbolos de odio cuando se utilicen para intimidar o incitar al odio contra un grupo en particular. Se prevén excepciones para fines legítimos como la educación, el arte o la investigación científica.
La ley se aprobó en enero de 2024, pero se acaban de introducir enmiendas que incluyen la prisión obligatoria.
Quienes sean declarados culpables de hacer "saludos nazis" o exhibir simbología de odio, así como intimidar a otros por cuestiones ideológicas, se enfrentarán a una pena mínima de obligado cumplimiento de prisión durante un año.
“Las circunstancias que enfrentamos en nuestra comunidad son tan extremas que requieren cambios en la ley”, dijo el primer ministro de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, a los medios locales. “No creo que las leyes actuales afronten adecuadamente este peligro. Revisamos las recomendaciones de la Comisión de Reforma Legal, estudiamos otras jurisdicciones y consideramos la evidencia del campo para hacer estos cambios”.