El mes pasado, Zelenskiy criticó al canciller alemán, Olaf Sholz por mantener una conversación telefónica con el presidente de Rusia, Putin. El presidente de Ucrania consideró que la llamada "socavaba los esfuerzos para aislar diplomáticamente a Moscú".
La tensión generada por el presidente ucraniano, que ha ido en aumento al criticar al primer ministro eslovaco, Robert Fico, señalando que había "planes turbios" entre Bratilsava y Moscú, han hecho que el actual secretario general de la OTAN, Mark Rutte, haya tenido que marcar una línea. Lo ha hecho específicamente por las declaraciones sobre Scholz, señalando que las críticas hacia el canciller alemán "no están justificadas" y le ha pedido a Zelenskiy que cese en su actitud.
"Le he dicho muchas veces a Zelenskiy que deje de criticar a Olaf Scholz, porque creo que es injusto" ha dicho Rutte hoy en una rueda de prensa.
Previamente, Zelensiy ya había criticado públicamente al canciller alemán por negarse a proporcionarle a Kiev misiles de crucero Taurus de fabricación alemana. En este asunto, Rutte dijo que él sí habría suministrado este tipo de armamento a Kiev, y que no impondría ningún tipo de límite al uso de este tipo de armas.
Sobre Fico, Zelenskiy ha dicho que las conversaciones y acercamiento matenido entre el primer ministro eslovaco y el presidente de Rusia, "debería ser motivo de preocupación para las fuerzas de seguridad y los servicios especiales de Eslovaquia".
El domingo, el viceprimer ministro eslovaco, Tomas Taraba, dijo que la visita de Fico a Moscú tenía como objetivo obtener gas a "precios normales".
Zelenskiy también afirmó en su mensaje que el gobierno eslovaco no quería “buscar un sustituto para el gas ruso” y que, por lo tanto, estaba ayudando a Moscú a “alejar de Europa el gas estadounidense y los recursos energéticos de otros socios”. Afirmó que Kiev considera “inmoral” “dicha ayuda” a Moscú .