Desde la Casa Blanca, según el Financial Times, se habría comunicado a Kiev la importancia de frenar los ataques a enclaves petroleros rusos, que comenzaron la pasada semana. Señalaron que estos ataques podrían provocar aumento en el precio del crudo a nivel mundial, lo que pudiera suponer dificultades para la campaña electoral de Biden.
La Casa Blanca "está cada vez más frustrada por los descarados ataques con drones ucranianos" contra refinerías, terminales y otras infraestructuras petroleras rusas, según ha informado el diario británico citando a fuentes gubernamentales norteamericanas.
Miedo en plena campaña electoral
Las objeciones de Washington se producen en el momento en que la campaña electoral hacia las presidenciales muestra la debilidad del candidato demócrata, actualmente al frente de la Administración de la Casa Blanca, Joe Biden. Señalan que "Biden se enfrenta a una dura batalla por la reelección este año, con los precios del petróleo en aumento, subiendo casi un 15%", apunta el Financial Times.
"Nada aterroriza más a un presidente estadounidense en funciones que un aumento en los precios de los combustibles durante un año electoral", apunta el ex-asesor de energía de la Casa Blanca, Bob McNAlly.
Señala también el diario británico que el servicio de seguridad ucraniano y el servicio de inteligencia militar estuvieron detrás de los recientes ataques a las refinerías. Y que precisamente estos servicios fueron directamente los receptores directos del mensaje de la Casa Blanca.