El diputado Andrew James Bridgen, que ocupa un escaño en el parlamento de Reino Unido desde 2010 en representación del noroeste de Leicestershire, era miembro del partido conservador, hasta que fue expulsado en el mes de abril de este año 2023 por criticar las vacunas contra la Covid-19.
Carta enviada al primer ministro, Sunak
Crítico con las medidas tomadas en pandemia, ha denunciado desde el primer momento el incumplimiento de las medidas de seguridad, y transparencia respecto a las llamadas vacunas contra el Covid-19.
Precisamente ayer, a través de sus redes sociales, hacía pública una carta que ha dirigido al primer ministro del Gobierno británico, Sunak, a la que acompaña un dosier donde, según él, estarían las pruebas para la denuncia que ha presentado ante el Fiscal General, por una presunta conducta criminal en lo que a la autorización y aprobación de las vacunas y refuerzos de Pfizer se refiere.
La carta puede leerse completa a continuación:
En sus redes sociales, el diputado ha explicado, como comentario adjunto a esta carta, que ha proporcionado pruebas al Fiscal General y al Primer Ministro que "indican que el MHRA (Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios) permitió a Pfizer hacer un "cebo y cambiazo" con su vacuna. La que se probó en 44.000 personas y se aprobó no fue la misma que se presentó al público en todo el mundo", ha afirmado el diputado.
Expulsión del partido conservador
El diputado fue expulsado del grupo conservador el pasado mes de abril por sus comentarios sobre la vacuna contra el Covid-19. Según recogía entonces BBC, el Partido Conservador expulsó al parlamentario después de que comparase las vacunas contra el Covid-19 con el Holocausto.
"Mi expulsión del Partido Conservador bajo falsos pretextos solo confirma la cultura de corrupción, colusión y encubrimiento que plaga nuestro sistema político", dijo en un comunicado.
Precisamente también, en el día de ayer, el diputado señalaba en sus redes una publicación del Dr. Josh Guetzkow, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, que precisamente, y siendo judío, hacía la comparación por la que Bridgen fue expulsado de su grupo parlamentario