Es portada en medios internacionales, como la agencia rusa de noticias TASS: "España bloquea la participación de la UE en la operación estadounidense en el Mar Rojo".
España, que había apoyado en Europa la ampliación de la operación Atalanta en el Comité Político y de Seguridad, giró su postura 24 horas después, vetándolo en el Grupo de Trabajo de Consejeros de Relaciones Exteriores, según ha publicado El Confidencial. El diario señala que el ejecutivo español ha dado marcha atrás "sorprendentemente".
Según la información publicada, desde el Gobierno de España se quería, inicialmente, que toda la comunidad europea participase en la misión. Durante la reunión de emergencia celebrada el pasado miércoles 20 de diciembre, el Comité Político y de Seguridad de la UE aprobó por unanimidad la participación de la UE en la iniciativa de ampliar la Operación Atalanta. Sin embargo, según ha publicado El Confidencial, 24 horas después, ayer jueves, 21 de diciembre, el Gobierno de España cambió de posición y vetó la decisión en la reunión del grupo de trabajo de asesores de la UE sobre relaciones internacionales. Un cambio de posición que no habría sido explicado previamente a su socios.
Razones políticas
Europa Press acaba de indicar que detrás de esta decisión de última hora hay "razones políticas". Y señalan cómo, después de que los 27, a nivel de embajadores europeos, dieran el visto bueno a la propuesta de Josep Borrell para "intensificar el intercambio de información y aumentar la presencia con medios navales adicionales" en coordinación con la misión lanzada por Washington que secundan ya una veintena de países, España bloqueó al día siguiente la formalización de este paso en el Consejo "repentinamente" y "sin dar ninguna razón".
Las fuentes consultadas por EuropaPress apuntan a que "el no" fue "duro y político", después de que los diplomáticos españoles pidieran consultar los cambios en esta Operación Atalanta. Según explican, a Estados Unidos "no le hizo ninguna gracia" el anuncio de Estados Unidos de que España participaría en la misión.
Bruselas aclara que la misión militar europea "no cambia" y seguirá dirigida por la UE con un mandato extendido para poder realizar labores de coordinación con la operación naval que ponga en marcha EEUU para frenar los ataques hutíes.