Una vez más, Siria es la gran olvidada del mundo. El terremoto ha destruido tanto Turquía como al país asolado por la guerra contra el ISIS. Pero por lo visto, una vez más hay víctimas de primera y segunda categoría. El foco se ha centrado en el drama que están viviendo los turcos, mientras que del país vecino, pese a que está sumido también bajo los escombros del seísmo, pocos se acuerdan. Miles de muertos y heridos, miles de edificios derruidos, miles de personas sepultadas bajo las ruinas... y miles de personas trabajando sin descanso para salvar el mayor número de vidas posibles. Pese a todo, a esta hora se desconoce el número exacto de víctimas mortales y de heridos, aunque probablemente se contarán por miles.
No llega ayuda a Siria
Hasta el momento la ayuda humanitaria está llegando únicamente a Turquía. En Siria, la solidaridad internacional tiene bloqueado el paso a través de unas fronteras selladas. “Es una decisión puramente política. Estamos en una catástrofe sin precedentes en esta región, y las diferencias políticas y militares entre la mayor parte de gobiernos y el régimen sirio hace que no vaya a llegar ningún tipo de ayuda a unos sirios que han sufrido el mismo terremoto”, denuncia a La Sexta el periodista Mikel Ayestaran, enviado especial a una de las zonas más afectadas por los seísmos para narrar de primera mano los instantes posteriores a la tragedia. Según el reportero, “quienes pagan estas consecuencias son los propios ciudadanos, que apenas cuentan con nada para rescatar a la gente”. En esta línea, la única vía directade entrada de suministros a las áreas del noroeste de Siria, el paso fronterizo de Bab al Hawa, ha quedado dañada. A la guerra civil se une el desastre del terremoto. El infierno en la Tierra se ha instalado en Siria.
“Adana [en Turquía] se ha convertido en la puerta de entrada para la llegada de la ayuda internacional. Los que lideran las operaciones son los turcos, que están sobradamente preparados. Pero la dimensión es tal que sí necesitan la ayuda de dispositivos extranjeros, que ya están desplegados sobre el terreno en coordinación con los turcos”, asegura el periodista.
Ahora mismo, más de 60.000 personas procedentes de distintos países –entre ellos, España–, colaboran en el desescombro y auxilio de las mencionadas víctimas y desaparecidos junto a más centenares de vehículos aéreos y terrestres. Solo en Turquía se ha logrado salvar la vida de más de 8.000 personas en las últimas 48 horas. ¿Cuál es la cifra en Siria? Se desconoce. “El trabajo de estos equipos se produce además rodeado de los familiares, amigos, vecinos, que están ansiosos por saber si sus seres queridos salen con vida”, explica Ayestaran, que recuerda que es “un trabajo con mucha presión” y advierte de que “hay lugares a los que aún no han llegado”.
Terremotos y guerras
Siria es un país devastado. La guerra civil se inició en tras las protestas antigubernamentales de 2011 contra Bashar al Assad. Las manifestaciones derivaron en enfrentamientos entre las Fuerzas Armadas del país y la denominada oposición siria, la cual incluye varios grupos terroristas, como el Consejo Nacional Sirio (SNC), con base en Estambul; la resistencia kurda, la cual ha creado su propia agrupación y su brazo armado llamado Unidad de Protección Popular (YPG en kurdo); y varios grupos islamistas, como el ex-Frente Al Nusra y el Estado Islámico (EI), que llegaron a tomar varias zonas del país desde Irak. El conflicto se ha extendido internacionalmente entre varios países, incluidos las dos mayores potencias nucleares, así como otras regionales. Los datos de la guerra civil son terribles. Entre el 1 de marzo de 2011 y el 31 de marzo de 2021, 306.887 civiles han perdido la vida, según Naciones Unidas. Una media de 85 inocentes asesinados cada día.