La Iglesia católica en plena decadencia (I)

13 de Febrero de 2022
Actualizado el 02 de julio de 2024
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EL VATICANO

Nunca me había podido imaginar que algún día escribiría un artículo como el presente. Lo digo con toda la sinceridad del mundo y confieso que me resulta muy doloroso y pesado tenerlo que hacer. Soy consciente que no gustará a los colectivos católicos y creyentes, incluyendo miembros de mi propia familia, pero el caso ha llegado a un punto que el hecho de ignorarlo no solo no ayuda sino que lo encuentro incoherente.

La Iglesia siempre ha tenido mucho de poder, durante siglos estuvo prohibido publicar la biblia en lo que decían lenguas vulgares, solo se podía hacer en latín, lo cual no permitía a la gente conocer sus contenidos. La pregunta es: ¿Cuál era el motivo? ¿Por qué a los feligreses no se les permitía su conocimiento?

¿Por qué en muchos países declarados cristianos (en todas sus variantes) permitieron la esclavitud y los diferentes responsables de iglesias lo permitieron, no lo impidieron y ni siquiera lo condenaron?

A lo largo de la historia podemos encontrar algunos ejemplos de lo que hoy no entenderíamos, como por ejemplo no aceptar una donación o transfusión de sangre. Lo que podemos afirmar es que, a excepción de las dos guerras mundiales, han sido las religiones -todas sin excepción- las causantes de más guerras que nadie i que  han asolado este planeta.

Dicho esto, me referiré en la Iglesia católica que es la que, por razones históricas, es la que nos afecta y en la que está inmersa nuestra comunidad. Hoy el problema grave de la iglesia tiene un nombre que se llama Pederastia que, según el diccionario lo define así: La relación sexual de un hombre adulto con uno o una menor. En las sociedades occidentales es considerada un delito tipificado dentro de la categoría de abuso sexual

Resulta estremecedor ver titulares de prensa sobre la pederastia y ver como la iglesia en muchos casos miraba hacia otro lado ignorante lo que estaba sucediendo.

Qué pensar si el anterior Papa miente, ¿que no harán otros responsables eclesiásticos? El informe sobre los abusos en la archidiócesis de Múnich incrimina a Benedicto XVI por no haber actuado. Joseph Ratzinger, que ejerció como arzobispo en Múnich, ha negado las acusaciones. La investigación, realizada por un bufete de abogados, revela 497 casos de abusos a menores cometidos por 173 sacerdotes.

Benedicto XVI reconoce, ahora sí, que estuvo presente en la reunión sobre un sacerdote acusado de abusos. El papa emérito, acusado de haber encubierto a clérigos abusadores, cambia la declaración que presentó a los investigadores sobre su actuación cuando era arzobispo de Múnich.

¿Y cuál es la situación en España? Se establece un pacto de silencio, ocultamiento y encubrimiento en torno a la pederastia, y cuando aparecen casos probados, lejos de ponerlos en manos de la justicia, se tiende a negarlos.

El cardenal Omella asegura que la Iglesia española investigará los casos de abusos, pero rechaza crear una comisión independiente. El Papa pide a la Iglesia una firme voluntad de esclarecimiento de los casos de abusos. Las palabras del Papa Francisco contrastan con la negativa de la Conferencia Episcopal Española a investigar los 251 casos que El País libró a este organismo y a la Santa Sede.

La Iglesia española queda rezagada en las investigaciones de los abusos sexuales. Los obispos otros países se han visto forzados desde hace décadas a afrontar los casos de agresiones de religiosos a menores. En España son reticentes a abrir investigaciones a fondo y admitir responsabilidades.

La Iglesia francesa ha anunciado una primera partida de 20 millones de euros para indemnizar a las víctimas de pederastia. El dinero proviene de la venta de inmuebles y de inversiones de los obispos y diócesis de todo el país.

¿Qué piensan ustedes, queridos lectores? Francia lo ha hecho, tarde pero ha reaccionado, ¿Lo hará ahora la iglesia española? Ahora mismo tiene muchas propiedades, aunque de forma no muy legal. Pero de esto ya hablaremos otro día.

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