Entre el 1 y el 11 de abril, Banco Santander ha abierto una nueva convocatoria de la iniciativa «Your Voice», con la que pretenden recoger, a través del testimonio de los trabajadores, la situación interna de la entidad.
Las denuncias que los propios empleados llevan realizando desde hace años indican que el ambiente laboral es muy duro en el banco presidido por Ana Patricia Botín quien, en la reciente Junta de Accionistas, no dudó en afirmar que «tenemos un modelo de escucha permanente para que los profesionales puedan decirnos lo que no funciona».
Sin embargo, la realidad se suele imponer a las palabras, sobre todo si éstas no revelan la verdad. Según ha denunciado el sindicato UGT, desde los equipos de mandos intermedios se están ejerciendo durísimas presiones hacia los trabajadores para que puntúen con un 10 la situación del Santander. Es decir, se pretende dar una imagen de que el banco es el paraíso cuando, en verdad, está más cerca de ser un infierno.
Por esta razón, se está haciendo un llamamiento para que los trabajadores valoren la realidad tal y como es y que no den pábulo a la mentira o al marketing del banco porque una valoración negativa basada en hechos reales es la única que podrá hacer que la entidad reaccione. Si en la cúpula siguen creyendo que la situación de los empleados es perfecta, entonces no cambiarán nada o incrementarán las presiones.
El sindicato UGT, en este sentido, es muy claro en una circular interna: «nos gustaría decir que este 'capítulo' sería distinto. Nos encantaría decir algo positivo sobre el estado de la plantilla, algo realmente inspirador que podría mostrar que el sentir de los trabajadores de Santander ha evolucionado a mejor, y que nos acercamos a lo que el Banco proclama y publicita de puertas para fuera. Pero, desgraciadamente, no podemos constatar nada por el estilo. Contestar de forma positiva, sin sentir o pensar realmente que Santander es una de las mejores empresas para trabajar, no sería la mejor forma de hacer ver a los responsables, al Consejo de Administración o a la Presidenta, cómo nos sentimos».