Una trumpista defendiendo a la extrema derecha alineada con los posicionamientos de Donald Trump y de Vladimir Putin. Eso es lo que ha sucedido hoy en la Asamblea de Madrid. Isabel Díaz Ayuso, en su guerra frontal contra el presidente del Gobierno, ha perdido los papeles y ha defendido a quienes califican a la democracia como un «sistema criminal», a quienes se pretenden arrogar el papel de embajadores de la extrema derecha supremacista y de la autocracia de Donald Trump y Vladimir Putin.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, en la sesión de control de hoy jueves, no ha dudado en señalar que «lo que condeno hoy abiertamente es que ese partido ponga sus pies en la Moncloa y no lo pueda hacer el grupo de Vox. Realmente lamento mucho que el tercer partido no pueda ir a la Moncloa».
Uno de los métodos más comunes de manipulación por parte del trumpismo y de la extrema derecha es la selección estratégica de datos. En lugar de proporcionar un análisis completo, se eligen cifras o hechos que refuercen una narrativa específica. Este tipo de manipulación no solo engaña a la ciudadanía, sino que refuerza prejuicios y odios existentes, en el caso de Ayuso, hacia Pedro Sánchez.
Además de seleccionar datos o hechos de manera parcial, se recurre a la distorsión. En el caso de la defensa a Vox por no ser recibida por el presidente del Gobierno Ayuso deja de lado el hecho de que el partido de la extrema derecha española se ha posicionado claramente en favor de Rusia por su dependencia de Hungría y por el cuestionamiento de la defensa europea por parte de Donald Trump.
Las muertes en las residencias
Como no podía ser de otro modo, la cuestión de las muertes de personas mayores en las residencias durante la pandemia ha protagonizado buena parte de la sesión de control en la Asamblea de Madrid.
Isabel Díaz Ayuso ha pasado al ataque y ha retado a Más Madrid «a que tengan un poquito de dignidad, un poquito de humanidad y dejen de retorcer el dolor de las víctimas con fines políticos cinco años más tarde que así les va en la Comunidad de Madrid».
Con el PSOE, evidentemente, ha endurecido el ataque, hiperbolizando cuestiones que deberían ser indiscutibles, pero que ella pone en tela de juicio, además de culpar a Sánchez de todos los muertos de la pandemia.
«Uno de los múltiples delegados del Gobierno que han tenido en la Comunidad de Madrid en estos cinco años dijo textualmente en una videoconferencia filtrada ‘Hay que retorcer el dolor de las víctimas, hay que instrumentalizar, hay que politizar ese dolor para sacarle rédito electoral’. Ustedes están colaborando con eso cada día. Y si, fiel a su estilo, la izquierda de este país, el Partido Socialista, no defrauda. Cada vez que hay una tragedia intentan politizarla, instrumentalizar. ¿Siguen recogiendo pellets algunos, siguen ya? La pandemia es que encima va directamente con ustedes, directamente con ustedes, porque son ustedes los que gestionan el Gobierno de la nación. Son ustedes los que tienen que escuchar las alertas sanitarias que, durante enero, febrero, marzo avisaba que venía una gran ola, una gran pandemia, pero ustedes estaban más preocupados en llevarnos a las calles y seguir instrumentalizando a las mujeres con un supuesto feminismo que se les cae por los cuatro costados. Por cierto, que los vicios cada uno se lo paga con su dinero, señorías, y no se explota a la mujer con el dinero público, como hacen ustedes. ¿Cuánta gente murió en España? No se sabe. Les da igual. 120.000, 130.000. No sabe ni las cifras, les da absolutamente igual y han estado así durante estos cinco años y los demás hemos estado callando porque nos daba vergüenza utilizar las víctimas como hacen ustedes».
Esta citación por parte de Ayuso de un elemento del que no hay evidencia clara, como es el caso de la supuesta videoconferencia, es otro mecanismo común del trumpismo: el uso de fuentes no verificadas que pretenden demostrar verdades alternativas. Evidentemente, esas declaraciones tienen su correspondiente difusión en busca de la viralización a través de las herramientas digitales. Esto se potencia con la propagación de desinformación en redes sociales y medios alternativos, donde se difunden noticias sin verificación o se presentan teorías conspirativas con apariencia de análisis serio.