Una acalorada comparecencia parlamentaria de la consejera de Desarrollo Educativo de la Junta andaluza, María del Carmen Castillo, para hablar sobre el plan de bioclimatización de las aulas públicas de la comunidad autónoma, ha servido para exponer visualmente un problema al que se enfrentan desde hace semanas, pero especialmente estos días de canícula extrema antes de la llegada oficial del verano, miles de alumnos y profesores de centros educativos públicos en toda la comunidad andaluza debido al cambio climático y las altas temperaturas. La portavoz del Grupo Socialista, Ángeles Férriz, dirigió esta pregunta a la consejera: “Usted, que está abanicándose aquí con aire acondicionado, póngase en la piel de mi hijo de ocho años que está ahora en un aula a 40 grados”. Castillo no pudo articular una respuesta y achacó “a la edad” el calor sofocante que estaba sufriendo este martes por la mañana en la Cámara autonómica mientras se aliviaba momentáneamente con un abanico.
La oposición en pleno, incluida Vox pese a sus conocidas teorías negacionistas del cambio climático, ha arremetido contra el escaso o nulo interés del ejecutivo de Moreno Bonilla por llevar a cabo en los 3.700 centros escolares públicos de la comunidad el plan de bioclimatización recogido en la ley pionera que el Parlamento andaluz aprobó por unanimidad hace ya un lustro, sin que por el momento haya tenido una aplicación testimonial en apenas el 12% de los centros educativos públicos de la comunidad, según los propios datos aportados por la titular de Desarrollo Educativo de la Junta este martes en comparecencia parlamentaria.
Ante esta desidia del Gobierno andaluz para un problema que afecta a diario durante varios meses del curso académico a miles de alumnos y profesores, las AMPA agrupadas en Escuelas de calor, principal impulsora de la ley de bioclimatización vigente en Andalucía, insta a las madres y padres de los escolares a sacar masivamente a sus hijos de los centros escolares a partir de las 12 del mediodía en aplicación del protocolo en vigor ante episodios de calor en las aulas.
“Saco a mi hijo del colegio porque es un edificio lesivo para su salud y que incumple la Ley de Bioclimatización”. Con este mensaje elevado a los docentes de los centros educativos, los progenitores de los alumnos de los 3.700 centros públicos de Andalucía quieren mostrar públicamente su “indignación”. “No vamos a parar de pelear por el cumplimiento de la ley de bioclimatización. La Junta de Andalucía incumple la ley y vulnera los derechos que ella genera para alumnado y docentes”, explica Escuelas de Calor en una nota.
En la comisión parlamentaria dedicada al grado de cumplimiento de la ley de climatización de aulas en Andalucía, la portavoz socialista preguntaba a la consejera si las altas temperaturas en Andalucía son “excepcionales”. “El problema es el desinterés, porque se han subido el sueldo dos veces en un año”, argumentó Férriz.
Las AMPA impulsan una iniciativa para sacar masivamente a los alumnos de las aulas a las 12 horas en aplicación del protocolo de la Junta contra las altas temperaturas
La portavoz del Grupo Popular, Remedios Olmedo, ha asegurado que el ejecutivo de Moreno Bonilla está haciendo “un buen trabajo” en la climatización de las aulas mientras recuerda que el cambio climático no es algo nuevo sino que se sabe que la temperatura se ha incrementado notablemente en los últimos 25 años en Andalucía mientras los sucesivos gobiernos socialistas no hicieron nada al respecto cuando estuvieron en el poder.
La consejera de Desarrollo Educativo ha destacado que la Junta está haciendo un esfuerzo para ampliar el Plan de Bioclimatización con la incorporación de otros 80 centros para continuar mejorando las condiciones térmicas y ambientales de las aulas andaluzas, con una dotación presupuestaria de 30 millones de euros, que se suman a los 175 millones ya invertidos. Castillo ha destacado que esta medida da continuidad a un programa que ya ha actuado en un total de 462 centros docentes, apenas el 12,4% del total de 3.700 centros educativos públicos de Andalucía. Pese a ello, la consejera asegura que son más de 1.300 los centros educativos públicos andaluces que tienen registrados en el sistema Séneca algún sistema de climatización en sus instalaciones, aunque no especifica si se trata de simples ventiladores o aparatos domésticos de aire acondicionado sufragados por los propios progenitores de los alumnos.
La consejera ha recalcado que el Plan de Bioclimatización es pionero en Andalucía para dar cumplimiento a la ley aprobada por unanimidad en el Parlamento y ha añadido que “ningún gobierno, ni de comunidad autónoma ni de fuera de España está gestionado en estos momentos un plan de bioclimatización de centros educativos de la envergadura del que está ejecutando la Junta”.
Sistema de refrigeración adiabática
La Junta ha apostado únicamente por la refrigeración adiabática en los centros escolares al considerar que es un sistema “de alta eficiencia desde el punto de vista energético y no utiliza fluidos refrigerantes que pueden ser dañinos para el medio ambiente, no reseca el ambiente y no produce cambios bruscos de temperatura, previniendo los resfriados y otras dolencias respiratorias”. No opinan del mismo modo las AMPA, que critican que estos sistemas necesitan un mantenimiento constante para evitar contagios de legionela, que las distintas administraciones no están dispuestas a sufragar.
La Junta, en cambio, cree que se trata de un sistema ecológico y sostenible que consume hasta una décima parte de la electricidad que gastan los aires acondicionados convencionales. Asimismo, considera que, al estar acompañada la instalación por paneles solares fotovoltaicos, el 100% de su consumo eléctrico puede ser satisfecho con energías renovables. “Es la opción de menor impacto ambiental, enfría el aire de forma suave y permite tener abiertas las ventanas, lo que mejora la calidad del aire interior”, explica la Consejería.