El paso de Dolores Delgado por la Fiscalía General del Estado ha estado trufada por la polémica y en varias ocasiones diferentes asociaciones de fiscales habían reclamado su dimisión. Hoy, la que fuera ministra de Justicia con Pedro Sánchez, ha dimitido alegando problemas de salud.
En principio, Delgado será sustituida por Álvaro García Ortiz, actual jefe de la Secretaría Técnica de la Fiscalía. El nombramiento podría ser confirmado en el Consejo de Ministros de hoy.
La ya exfiscal general del Estado había estado de baja médica durante dos meses tras someterse a una intervención urgente de columna. A finales de junio se había reincorporado a su puesto de trabajo con cierta dificultad.
Esta situación es la que se ha alegado en una carta remitida por Delgado a la ministra de Justicia, Pilar Llop. La exfiscal general del Estado hace un balance positivo de una gestión que ha estado acompañada de la polémica desde su nombramiento.
El PSOE quiso blindar a Delgado
El PSOE de Pedro Sánchez, a pesar de las constantes polémicas surgidas durante la gestión de Dolores Delgado, pretendió blindar el futuro profesional de ésta incluyendo en la tramitación de la Ley Concursal una enmienda en la que se señalaba que si la persona que ocupe la Presidencia de la Fiscalía General del Estado pertenece a la carrera fiscal adquirirá la categoría de fiscal de Sala del Tribunal Supremo una vez sea cesada del cargo. Es decir, un «traje a medida» para Dolores Delgado.
La enmienda señalaba que «se modifica el apartado 6 del artículo 31 de la ley por la que se regula el Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal que queda redactado como sigue: Si el nombramiento de fiscal general recayese sobre un miembro de la carrera fiscal quedará en situación de servicios especiales y adquirirá la categoría de fiscal de Sala del Tribunal Supremo una vez se produzca su cese».
¿Qué tenía que ver la Ley Concursal con el futuro profesional de Dolores Delgado? Nada, absolutamente nada. Se trató, en consecuencia, de una maniobra de «trileros» e impropia de un régimen democrático.
Finalmente, a finales del mes de junio, coincidiendo con la reincorporación de Delgado tras la baja laboral, el PSOE renunció a dicha enmienda por el rechazo de todos los grupos parlamentarios a la misma.
Hay que tener en cuenta que se habían recibido serios avisos incluso de la Comisión Europea donde se advirtió de que ese movimiento de blindaje de Dolores Delgado iba a ser incluido en el informe sobre calidad democrática de los países miembros.