El Gobierno de Pedro Sánchez se lava las manos con Nerva

28 de Marzo de 2023
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Encuentro Hugo Morán Nerva 2

Prácticamente 25 años después de su creación, un alto cargo ministerial ha visitado por primera vez la localidad onubense de Nerva para conocer in situ la problemática del polémico vertedero de residuos tóxicos y peligrosos, protagonista de incontables incidentes medioambientales, denuncias vecinales y una histórica fractura social ya felizmente superada, precipitada sobre todo tras los hechos más recientes relacionados con el intento de la empresa gestora de promover su ampliación en pleno confinamiento por la pandemia del Covid-19 y la oposición frontal de todos los ayuntamientos de la comarca minera y los colectivos ecologistas y vecinales, unidos desde hace años ya en la lucha por un cierre inmediato de estas instalaciones, denunciadas en numerosas ocasiones por incumplir la normativa vigente y poner en peligro la salud de sus más de 5.000 vecinos prácticamente desde su creación allá por 1998.

Hugo Morán, el número dos de la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha visitado este lunes 27 de marzo el municipio y las instalaciones del vertedero tras la promesa realizada a finales del pasado 2022 en sede ministerial a los miembros de la Comisión por el Cierre del Vertedero Ya. Su visita a Nerva se ha saldado con una vaga promesa de promover, entre las administraciones competentes, una mesa de diálogo entre todas las partes afectadas que desemboque en un cierre, inconcreto y sin fecha fija en el calendario, de estas colmatadas instalaciones, ubicadas a escasos 700 metros del núcleo poblacional.

De este modo, el representante ministerial ha reconocido veladamente que su presencia en Nerva ha sido prácticamente testimonial y en un evidente ambiente preelectoral, ya que las competencias en la gestión de residuos están en manos de la Junta de Andalucía, aunque el número dos del Ministerio para la Transición Ecológica ha omitido que fue precisamente el Gobierno central el que permitió expresamente que una partida de 120.000 toneladas de residuos peligrosos procedentes de un país extracomunitario como es Montenegro pudiera llegar a a Nerva por mar hasta Sevilla y de aquí al municipio onubense en camiones. Sólo la denuncia del traslado por parte de Ecologistas en acción y la posterior movilización vecinal obligaron al Gobierno central a frenar en parte la llegada de esta basura tóxica a Nerva e imponer una exigua multa de 10.000 euros a una multinacional francesa que gestionó el traslado y tratamiento de los residuos peligrosos de Montenegro.

Nerva
Reunión este lunes en el Ayuntamiento de Nerva del número dos del Ministerio para la Transición Ecológica con los colectivos afectados

El número dos del Ministerio para la Transición Ecológica se ha reunido en primer lugar con el alcalde de la localidad, el socialista José Antonio Ayala, y posteriormente con una representación de asociaciones vecinales y colectivos de lucha por el cierre del vertedero. Morán no ha llevado en su visita a Nerva ningún plan de actuación concreto y se ha limitado a emplazar a los afectados a encontrar un camino de consenso para lograr el cierre definitivo de este vertedero, que ha venido recibiendo basuras tóxicas y peligrosas prácticamente desde su creación hace 25 años procedentes de todos los puntos del país, además de otras naciones de la Unión Europea e incluso residuos procedentes de países extracomunitarios como el caso reciente de Montenegro, a más de 3.200 kilómetros de distancia. Todo ello pese a que lo acordado por todos los responsables implicados para su puesta en funcionamiento a finales de los noventa del pasado siglo se limitaba a la recepción de residuos procedentes exclusivamente de Andalucía occidental. Esta primera promesa se incumplió desde el primer momento de la creación del vertedero.

La visita ministerial se produce justo dos meses antes de las decisivas elecciones municipales del próximo 28 de mayo y apenas unos días después de que el Gobierno andaluz de Juan Manuel Moreno Bonilla haya aprobado la nueva Ley de Economía Circular, con los votos de PP y PSOE, que implica, entre otros aspectos, que a partir de ahora este vertedero no podrá recibir basura tóxica de fuera de la comunidad como ha venido haciendo prácticamente desde sus inicios sin estar habilitado para ello.

El ambiente preelectoral en Nerva está claramente determinado por el devenir de la polémica del vertedero. En la actualidad todos los municipios de la cuenca minera de Riotinto están gobernados por el PSOE, que fue precisamente el partido que impulsó la creación de estas instalaciones en 1998 con el objetivo teórico de compensar el elevado desempleo que sufría la zona tras la caída de la actividad minera. Ninguna de las promesas de entonces han fructificado en estos 25 años y ahora ni tan siquiera el ayuntamiento nervense recibe el canon correspondiente por parte de DSM, la empresa que gestiona el vertedero, como supuesta compensación por su actividad a las puertas del municipio. El paro estructural sigue siendo una lacerante realidad en el municipio minero y el vertedero apenas da empleo en la actualidad a una treintena de trabajadores mientras los vecinos tienen la sensación de que han convertido el pueblo en el basurero de Europa.

El número dos de la vicepresidenta Teresa Ribera Morán no ha llevado a Nerva ningún plan de actuación concreto y se ha limitado a pedir un camino de consenso para lograr el cierre definitivo de este vertedero

La reunión en Nerva del secretario de Estado de Medio Ambiente con el alcalde y los colectivos vecinales y ecologistas ha evidenciado que el ejecutivo de Pedro Sánchez no tiene ningún plan de actuación concreto pese a la situación límite que se vive en la localidad. El número dos de la vicepresidenta Ribera se ha limitado a pedir a la empresa que gestiona el vertedero que asuma su decisiva cuota de responsabilidad en este conflicto y devuelva al municipio la soberanía que posee para ser dueña de su futuro más inmediato, una vez que tanto la corporación municipal como los vecinos y distintas asociaciones y entidades ecologistas están completamente de acuerdo en el cierre inmediato del vertedero tras 25 años de funcionamiento. “Se abre una nueva etapa en relación a la convivencia de Nerva con el vertedero, que debe abordarse desde el diálogo de todas las partes”, ha señalado en Nerva el secretario de Estado de Medio Ambiente.

Durante todos estos años, todas las administraciones competentes en la materia, tanto el Gobierno central como la Junta de Andalucía, han mantenido una actitud claramente complaciente con la empresa que gestiona esta planta de residuos tóxicos y peligrosos, pese a los numerosos incidentes medioambientales y las reiteradas denuncias por mala praxis. Y ello pese a constatarse que buena parte del vertedero está ya colmatado y ha terminado su vida útil de funcionamiento. Sin ir más lejos, recientemente la Junta de Andalucía ha impuesto una millonaria multa a DSM por superar la capacidad legal de almacenaje. Por ello, ha ordenado el cierre solo parcial de las instalaciones tras constatar las denuncias de saturación que ecologistas y vecinos vienen denunciado desde hace años. Pese a todo, el ejecutivo de Moreno Bonilla ha dejado abierto un tercio del vertedero pese a constatar que la empresa ha falseado datos de forma “intencionada” y superado en casi tres millones de toneladas su capacidad legal.

Durante la reunión en Nerva del número dos del Ministerio para la Transición Ecológica con los colectivos afectados, el representante de la asociación Nerva, Salud y Dignidad, José Luis Lozano, ha reprochado al Gobierno central su falta total de iniciativas y compromiso con el sentir generalizado de los vecinos de Nerva. Lozano ha recordado al secretario de Estado de Medio Ambiente que la ministra a la que representa “no tuviese siquiera la deferencia de responder, aunque fuese protocolariamente, a la carta que hace más de dos años le enviaron” desde su organización. Además, este representante vecinal ha expresado su profundo pesar porque desde el Ministerio para la Transición Ecológica no se haya legislado para poner fin al “despropósito” de la vigencia de este vertedero. Lozano ha recordado al número dos de la vicepresidenta Ribera que “la Junta de Andalucía, con sus últimas decisiones, les ha pasado por la izquierda, lo cual es muy triste, sobre todo porque estamos hablando de un gobierno progresista que no ha mostrado la más mínima sensibilidad por Nerva”.

El representante de Ecologistas en Acción, Juan Romero, ha recordado que fue un error histórico construir este vertedero a 700 metros de donde viven las personas y ha añadido que “ha llegado la hora de ponerle punto y final, que ha sido y es el reto de quienes lucharon y siguen luchando por su cierre”. Romero ha recordado que siguen llegando a Nerva residuos de todas partes, convirtiendo este municipio en el “retrete tóxico de medio mundo”. Romero apunta que la empresa del vertedero debe asumir el gasto del cierre de esta instalación y que se debe aportar una “alternativa” a los trabajadores, “en el marco de las muchas oportunidades que ofrece la economía limpia y verde, lejos del mundo de los residuos”, apuntó el dirigente ecologista.

Por su parte, el histórico dirigente antivertedero Fermín Capado insistió al secretario de Estado para que se haga cumplir la normativa vigente y se recuerde a la empresa que la autorización que se le concedió en su momento ya ha finalizado su periodo de utilidad y “no caben más recrecimientos ni ampliaciones en esta instalación”.

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