Mazón activa grupos de emergencia por la DANA y solicita refuerzos al Gobierno: 'Es un escenario de guerra'

El presidente valenciano reclama ayuda de siete ministros y refuerzos militares para enfrentar los estragos de las inundaciones

02 de Noviembre de 2024
Actualizado el 04 de noviembre
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Mazón en su laberinto
Carlos Mazón pide la incorporación de siete ministros al grupo de respuesta

Las devastadoras consecuencias de la DANA han empujado a la Generalitat Valenciana a desplegar una respuesta sin precedentes. El presidente Carlos Mazón ha anunciado la creación de cinco grupos de trabajo, organizados para atender a las necesidades urgentes de las zonas afectadas. En una intervención tras la reunión del Centro de Coordinación Operativo Integrado (Cecopi), Mazón solicitó al Gobierno de España la intervención de siete ministros y el jefe del Estado Mayor de la Defensa para reforzar los esfuerzos ya en marcha.

"La DANA ha dejado un escenario que nadie esperaba," explicó Mazón, "y necesitamos una respuesta inmediata y coordinada." Los nuevos equipos abarcan áreas críticas como sanidad, infraestructuras, vivienda y servicios sociales, empleo y empresa, e interior. Cada grupo estará liderado por distintos consellers valencianos, con el objetivo de poner en marcha medidas de recuperación, asistencia a los damnificados y reconstrucción de las zonas devastadas.

Ayuda nacional en marcha

El Gobierno de Pedro Sánchez no ha tardado en responder. Desde Moncloa, fuentes oficiales han asegurado que se transferirán todos los recursos humanos, logísticos y económicos necesarios para apoyar a la Comunidad Valenciana. Además, han confirmado que los ministros solicitados por Mazón se sumarán a los grupos de trabajo, junto con secretarios de Estado y técnicos, dependiendo de las demandas específicas.

El presidente valenciano solicitó que se incorpore al Cecopi el jefe del Estado Mayor de la Defensa para coordinar a los efectivos militares, cuya presencia en la región ha sido indispensable. Según fuentes del Gobierno, el despliegue de 7.000 efectivos del Ejército, que podría ampliarse, es una de las operaciones de emergencia más grandes vistas en años en la región.

Grupos de respuesta inmediata y sus objetivos

Los cinco grupos de emergencia anunciados por Mazón tienen objetivos específicos:

1. Sanidad: Este grupo estará liderado por Marciano Gómez y se centrará en la evaluación de riesgos epidemiológicos en las zonas afectadas. La ministra de Sanidad, Mónica García, participará en las labores de coordinación y asistencia, para desplegar mecanismos de prevención y tratamiento ante posibles riesgos de salud pública.

2. Infraestructuras: Bajo la dirección de Vicente Martínez Mus y Miguel Barrachina, este grupo trabajará en un plan de recuperación urgente de carreteras, puentes y otros sistemas críticos. Con el apoyo del ministro de Transportes, Óscar Puente, se prevé la movilización de recursos para reparar y mantener las comunicaciones esenciales en la región.

3. Servicios Sociales y Vivienda: La vicepresidenta del Consell, Susana Camarero, y la consellera Ruth Merino estarán a cargo de este grupo, que se enfocará en el realojo y la reconstrucción de viviendas dañadas. La participación de los ministros Pablo Bustinduy (Derechos Sociales) e Isabel Rodríguez (Vivienda) garantizará la puesta en marcha de ayudas directas y la activación del parque público de viviendas para los damnificados.

4. Empleo y Empresa: Encabezado por José Antonio Rovira y Nuria Montes, este grupo tendrá la tarea de establecer ayudas para trabajadores y autónomos afectados. Con el respaldo de Yolanda Díaz y Carlos Cuerpo, se pondrán en marcha ERTEs por fuerza mayor y se habilitarán mecanismos de cese de actividad para los autónomos, además de facilitar el teletrabajo en los casos posibles.

5. Interior: Con Salomé Pradas al mando y la colaboración del ministro Grande-Marlaska, el grupo interior reforzará la seguridad en las zonas afectadas para prevenir robos y saqueos, un riesgo constante tras la catástrofe.

Una situación que desborda lo imaginable

Las lluvias torrenciales han dejado más de 200 fallecidos y cientos de heridos en la provincia de Valencia, mientras que los daños materiales son incalculables. El pasado fin de semana, las calles de Valencia y sus alrededores parecían zonas de guerra: coches amontonados, viviendas anegadas y negocios arrasados. La DANA ha devastado numerosas infraestructuras, dejando incomunicadas a varias áreas rurales y poniendo en riesgo a miles de personas.

El retraso en la emisión de alertas ha sido uno de los puntos de crítica hacia el gobierno valenciano, y Mazón ha defendido sus acciones afirmando que se respetaron los protocolos de seguridad. Sin embargo, la situación de descoordinación inicial y la falta de una respuesta inmediata han sido señaladas como fallos en la gestión, tanto por la ciudadanía como por miembros de su propio partido.

El Gobierno intensifica los refuerzos

Además de los 7.000 efectivos desplegados, el presidente Sánchez ha confirmado la llegada de otros 5.000 militares y 5.000 policías y guardias civiles en los próximos días. Según Moncloa, la prioridad sigue siendo salvar vidas y restablecer los suministros básicos.

A través de la Unión Europea, Mazón también ha solicitado la activación del Fondo de Solidaridad Europeo para financiar parte de las medidas de recuperación. Desde el Gobierno de España, han anunciado que acelerarán este proceso, con la intención de canalizar los recursos lo más rápido posible.

¿Está Mazón a la altura del reto?

Mientras Mazón llama a la ayuda estatal, el balance de su gestión en los primeros días de la crisis ha sido objeto de controversia. Al recibir críticas por no gestionar eficazmente la situación, Mazón ha prometido una mayor rapidez y coordinación en las acciones a partir de ahora. Sin embargo, los cuestionamientos persisten: desde su demora en activar alertas hasta el rechazo inicial a los voluntarios, lo que provocó que miles de personas, listas para ayudar, fueran redirigidas o perdieran tiempo esperando.

Por otro lado, el refuerzo de la seguridad es un punto de presión que no ha pasado desapercibido. Mazón ha pedido que se revisen los protocolos de Protección Civil, para mejorar la notificación de alertas en eventos meteorológicos extremos.

Unidad frente a la catástrofe

A pesar de las críticas, la colaboración entre administraciones ha mostrado un esfuerzo de unidad frente a la magnitud de la tragedia. Las decisiones de Mazón para requerir apoyo del Gobierno central reflejan la necesidad de una intervención integral. Los ministros ya han comenzado a trabajar con sus homólogos valencianos para reactivar la economía local, garantizar el acceso a servicios de salud y restaurar infraestructuras vitales.

Mientras continúan los esfuerzos de recuperación, la Generalitat Valenciana y el Gobierno central parecen estar alineados en el objetivo de devolver la normalidad lo antes posible a las zonas afectadas. Para las comunidades golpeadas por la DANA, la esperanza de una respuesta efectiva y rápida podría marcar la diferencia entre la recuperación y el desarraigo.

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