El PSOE es un partido al que Pedro Sánchez ha incorporado el miedo como método de liderazgo. En el actual Partido Socialista se ha visto cómo se purgaba a dirigentes críticos elegidos por la militancia en sus circunscripciones.
Con la Ley de Amnistía desde Ferraz se ha pretendido que hubiera un cierre de filas. Sin embargo, líderes como Javier Lambán o Emiliano García Page siempre se han mostrado contrarios a esta ley que ha sido aprobada como pago por la Presidencia del Gobierno.
Page hoy ha demostrado una vez más que no le tiene miedo a Pedro Sánchez y ha anunciado que Castilla-La Mancha ha iniciado los trámites para recurrir la Ley de Amnistía ante el Tribunal Constitucional, sumándose de este modo a los recursos que presentarán las comunidades autónomas del Partido Popular.
El presidente castellano manchego ha sido contundente: "El perdón no se contrata: se da o no se da, pero no se hace cambio de nada y menos a cambio de un chantaje."
García Page ha dejado muy claro que defenderá a sus ciudadanos de "esta agresión a la igualdad" y ha advertido a Sánchez de que "ojalá todo el mundo cumpliera con lo que promete, es la esencia de la convivencia."