El Partido Popular tiene un sentido muy peculiar de la libertad de expresión y la piel muy fina o muy rugosa según quien le saque las vergüenzas o alabe sin rubor sus políticas y su gestión como principal partido de la oposición. Mientras en el Congreso de los Diputados los populares se unieron recientemente sin complejos a la extrema derecha para apoyar la labor agitadora de personajes como Vito Quiles o Bertrand Ndongo, que acosan tanto a políticos como a verdaderos periodistas que ejercen su labor en la Cámara Baja, ahora ha presentado en el Congreso de los Diputados una decena de preguntas a la Corporación de RTVE para exigir el cese de la colaboradora Sarah Santaolalla “tras insultar a millones de españoles” después de que llamara “idiotas” e “inútiles mentales” a los votantes de PP y Vox en una de sus participaciones en el programa matinal Mañaneros 360, de La 1 de TVE.
Las muestras de apoyo tanto de compañeros como de políticos a la colaboradora televisiva no han parado de sucederse nada más conocer a última hora de este miércoles las intenciones del PP de extender una mordaza sobre la tertuliana televisiva. Tanto PP y Vox llevan ya un tiempo poniendo el foco sobre algunos periodistas y programas de TVE, sobre todo en Silvia Intxaurrondo, Javier Ruiz y Jesús Cintora. Estas críticas procedentes de las derechas a la labor periodística de estos profesionales en la televisión pública coincide con unos índices de audiencia claramente al alza de los programas que presentan y dirigen.
Ahora, el PP ha visto una oportunidad de oro para tirar de victimismo y exigir el cese de la colaboración de Santaolalla en la televisión pública con el argumento de que ha insultado a millones de españoles. “Sarah Santaolalla recibe una remuneración sufragada con dinero público por su colaboración en RTVE, y esto es incompatible con el insulto a millones de españoles, por lo que exigimos a la Corporación que rescindan de inmediato cualquier colaboración con esta analista”.
La ofensiva de los populares contra TVE coincide con unos índices de audiencia claramente al alza de los programas que presentan y dirigen los profesionales señalados
Los populares añaden que TVE también está llevando a estos programas “como supuestos expertos o ciudadanos anónimos a cargos políticos”. También rechazan que se haya fichado a “periodistas significativamente de izquierdas en detrimento de los profesionales de la casa”.
El PP, que mantiene un férreo control informativo en todas las televisiones autonómicas donde gobierna, como así lo atestiguan las denuncias de sus propios profesionales y trabajadores (el caso de Canal Sur es escandaloso, pero no el único), ahora se rasga las vestiduras con estos programas informativos de TVE, que están obteniendo unos inmejorables datos de audiencia como no lo han tenido en años. “Han intensificado la propaganda a favor del Gobierno en el peor momento para el Partido Socialista, tratando de que no se hable de su corrupción y de su inoperancia”.