El sector educativo de la Comunidad de Madrid vive hoy una de sus jornadas de huelga más significativas, con un seguimiento que supera el 70% y una respuesta masiva en centros de Educación Infantil y Primaria, donde históricamente la movilización ha sido menor. Este fuerte respaldo reafirma el apoyo de los docentes a las reivindicaciones de reducción de horas lectivas y mejoras en la ratio de alumnos por clase. La jornada tiene un eco especial en zonas como el sureste de Madrid capital y localidades del sur, como Fuenlabrada y Rivas, donde el seguimiento ha aumentado en comparación con huelgas anteriores.
La huelga, convocada por los sindicatos CCOO, UGT, ANPE y CSIF, responde a una serie de demandas clave del profesorado: reducción del horario lectivo a 18 horas en Secundaria y 23 en Infantil y Primaria, menores ratios por aula y la contratación de personal necesario para atender a la diversidad en las aulas madrileñas. El apoyo docente, que se traduce en la paralización de la mayoría de los centros educativos, también incluye una contundente respuesta en la capital, especialmente en el distrito centro, donde el seguimiento ha incrementado respecto a movilizaciones previas.
Protesta generalizada y demandas educativas
Los sindicatos destacan que esta huelga ha afectado de manera generalizada el funcionamiento de los centros educativos de la Comunidad de Madrid. Isabel Galvín, secretaria de Enseñanza de CCOO Madrid, ha subrayado la "inmensa movilización" del profesorado y la solidez de sus exigencias. “Llevamos años solicitando medidas de apoyo a los docentes, más personal y la reducción de la carga lectiva. La Consejería sigue sin escuchar”, denuncia .
La secretaria del sector de Enseñanza de UGT Madrid, Teresa Jusdado, ha reclamado a presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, una bajada "real" de ratios por aula para combatir el abandono escolar, mejorar el rendimiento del alumnado y ayudar a la conciliación familiar y, ha volorado positivamente los datos de participacion del profesorado en la protesta de hoy.
Por su parte, Emilio Viciana, consejero de Educación de la Comunidad, declaró que en dos días presentará una “oferta muy interesante” a los sindicatos, afirmando que el gobierno madrileño “siempre está del lado de los docentes y familias”. Sin embargo, el escepticismo de los sindicatos frente a esta declaración es evidente, y ya adelantan que las promesas de Viciana llegan con dos meses de retraso, lo que pone en duda la seriedad de su compromiso.
Concentración de huelguistas y servicios mínimos
Desde las 8 de la mañana, piquetes informativos han recorrido los centros educativos para asegurar la asistencia a la huelga y dar apoyo a docentes que buscan recuperar las horas lectivas anteriores a los recortes de 2011. Entre los centros educativos más movilizados destacan los de Secundaria, con 124 asambleas constituidas en institutos, aunque la huelga también ha logrado fuerte respaldo en 22 colegios de Educación Primaria e Infantil.
A pesar del alto seguimiento, la Consejería de Educación impuso servicios mínimos estrictos para asegurar la actividad en los centros, incluyendo la obligatoriedad de la presencia del director, jefe de estudios o un secretario en cada colegio, además de un maestro por cada 50 alumnos en Infantil y Primaria y un profesor por cada 90 en Secundaria. Los sindicatos han calificado estos servicios mínimos como “abusivos” e “ineficaces” para permitir una movilización real del profesorado.
Una huelga de fondo y forma
La huelga es más que un paro por la reducción de horas; se trata de una crítica estructural al abandono de la educación pública madrileña. “Los recortes han llevado al profesorado al límite, y solo estamos pidiendo medidas que ya funcionan en otras comunidades”, comenta Teresa Jusdado, secretaria de Enseñanza de UGT. La asamblea de docentes también ha expresado su rechazo a la política educativa que, según critican, "favorece a la educación concertada". Entre 2011 y 2021, el gasto público en conciertos educativos ha aumentado un 28.5%, pasando de 5.779 millones de euros a 7.426 millones, lo que contrasta con las demandas insatisfechas en el sector público.
Madrid capital y la zona sur al frente de la protesta
Las zonas sur y este de Madrid han mostrado un incremento en la participación en esta huelga. Distritos de Madrid capital, como el centro, han elevado sus cifras de seguimiento, mientras que en localidades como Fuenlabrada y Rivas el paro ha sido secundado masivamente. El éxito de la huelga se observa también en la organización de las asambleas docentes, que han crecido de 80 a 149 en los últimos meses, potenciando la red de centros movilizados.
Para Andrés Cebrián, presidente de ANPE-Madrid, la movilización del profesorado es “indispensable” para lograr cambios reales: “Estamos viendo cómo comunidades como Castilla y León o Andalucía han revertido los recortes de 2011, y Madrid no puede ser una excepción. Es hora de que la Comunidad asuma su compromiso con la educación pública”.
Camino a Neptuno y la próxima huelga de noviembre
La manifestación de la huelga educativa de este martes partirá de la Plaza de Neptuno y llegará a la Puerta del Sol a las 17:30 horas. Esta acción se suma a la programación de una nueva huelga para el 21 de noviembre, en la que se espera un seguimiento aún mayor. La presión sobre el gobierno autonómico se mantiene alta y las expectativas en el profesorado son claras: la negociación no debe quedarse en palabras.
Las cifras que respaldan el cambio
La Comunidad de Madrid es la única en España que mantiene el horario lectivo incrementado desde 2011, con 20 horas en Secundaria y 25 en Infantil y Primaria. La lucha por reducir estas horas se apoya en datos concretos: en el último informe estatal sobre indicadores de Educación de 2024, Madrid figura como la segunda comunidad que más destina al sector concertado, con un 19.6% de su presupuesto, solo superada por Euskadi.
Isabel Galvín insiste en que “es inaceptable que se priorice el financiamiento de centros concertados mientras se mantiene a los docentes de la educación pública con sobrecarga y sin recursos adecuados para atender a los alumnos”.
La respuesta de la Consejería, en la mira
La cita con Emilio Viciana este jueves será un momento clave para determinar si la Consejería de Educación realmente se compromete a atender las demandas del sector público. Los sindicatos están listos para evaluar cualquier propuesta, aunque las expectativas son limitadas ante el histórico retraso en las negociaciones.
Mientras tanto, la huelga en la educación madrileña es un claro recordatorio de las demandas del profesorado, que espera que el gobierno de la Comunidad reaccione ante una realidad que afecta a miles de estudiantes y docentes. La educación pública sigue en pie de lucha, y los docentes en Madrid no parecen dispuestos a ceder sin un cambio tangible.