Luis Rubiales, ex presidente de la Federación Española de Fútbol, comparece en el juzgado para defenderse por su beso a la jugadora Jenni Hermoso durante la celebración del Mundial femenino. Rubiales sostiene que pidió permiso a la jugadora para darle un beso en los labios durante el saludo de autoridades, tras la victoria en el campeonato de Sidney de agosto de 2023, algo que la jugadora internacional ha declarado que ni percibió ni hubiese consentido de todos modos. Y en esa idea abundará el expresidente de la Federación en su declaración como acusado, según informa La Sexta.
Tras seis jornadas sentado a la izquierda de su abogada, Olga Tubau, con la que ha ido comentando, a veces con gestos de disconformidad, las comparecencias de los testigos, Rubiales se sienta frente al juez José Manuel Fernández-Prieto para dar su versión de lo ocurrido. “¿Acostumbraba a saludarla dándole un beso en la boca?”, le pregunta la fiscal al expresidente de la RFEF. “No se gana un Mundial todos los días”, responde Rubiales. “¿Si hubiera sido un hombre la habría dado un beso en la boca?”, pregunta la fiscal. “Si es otra jugadora con la que tengo esa buena relación...”, explica Rubiales. “Yo me comía a besos a un montón de futbolistas”, añade sobre celebraciones de otros campeonatos.
Acto seguido, le pregunta la fiscal sobre el momento en el que piden a Jenni Hermoso que salga del vestuario tras el beso. “Lo que había acontecido no tenía ninguna importancia ni para ella ni para mí”, asegura Rubiales. “Yo llamé a Jenni porque ella sabía que íbamos a ir a Ibiza y quería comunicarlo junto a ella. No la llamé para hablar del beso. Había una cámara de FIFA a cinco metros”, explica Rubiales.
Ha comenzado la séptima sesión del juicio al expresidente de la RFEF. A petición de la defensa de Rubiales, varios peritos declaran sobre el informe de lectura de labios de las palabras que el expresidente federativo asegura que pronunció antes de besar a Jenni Hermoso, y sobre la autenticidad del vídeo analizado para dicha pericial.
La defensa de Rubiales le pregunta al perito David Murillo sobre el análisis que hizo en su informe. Murillo explica que es una persona sorda de nacimiento y que ha desarrollado la habilidad de leer los labios. Señala, a preguntas de la abogada de Rubiales, que tiene experiencia en otros tipos de informes periciales, en colaboraciones con otras fuerzas del Estado como la Guardia Civil.
Según Murillo, en el informe se le pidió que analizara “el momento previo al que el señor Rubiales le diese el besito”. Explica el perito que analizaron el vídeo de TVE, que no les sirvió y que sí pudieron analizar bien un vídeo de TikTok en el que las imágenes eran más nítidas. “¿Vio usted claramente el movimiento de los labios de Rubiales?”, pregunta la abogada de Rubiales. “Sí”, responde el perito, que añade que fueron dos segundos de comunicación. “¿Qué decía?”, pregunta la abogada. “¿Te puedo dar un besito?”, afirma el perito que lee en los labios de Rubiales.
Y prosiguen las preguntas de la fiscal. Le pregunta al especialista con qué material trabajó y quién se lo envió. “¿Ese vídeo de TikTok, que es el único que dicen que examina, de quién es, quién lo sube?”. “Lo desconozco”, afirma el perito. “¿Se ve lo que responde Jenni Hermoso?”, pregunta la fiscal. “No”, alega el técnico. “¿Se preocupó de buscar otros vídeos?”, insiste la representante del Ministerio Público. “No”, contesta el experto. “¿Cuantas veces ha intervenido en peritajes judiciales? ¿Dónde? Usted es una persona sorda que pertenece a una asociación de personas sordas. ¿Esa es su acreditación como perito?”, vuelve a la carga la fiscal con dureza. El perito no concreta casos directos, basándose en su “deber de secreto”, y señala además que no hay cursos ni acreditaciones para peritos de este tipo, según las fuentes de La Sexta. Le recuerda la fiscal que en la instrucción el perito, que vive en Granada, declaró que conocía a Rubiales de forma indirecta, por otras personas.
Por su parte, las compañeras de Jenni, las futbolistas Misa Rodríguez, Alexia Putellas, Irene Paredes y Laia Codina, ofrecieron su versión de cómo se encontraba Hermoso en los momentos posteriores al beso: desde el avión de vuelta de Sidney, donde se proclamaron campeonas del mundo, hasta la celebración en Ibiza.
Todas ellas coincidieron en afirmar que Jenni, normalmente de carácter “alegre”, tenía la “cabeza en otro sitio”. “A mí me sorprendía porque le habíamos dicho que intentara desconectar, pero le vi que no era ella”, llegó a apuntar Rodríguez.
La amiga de Hermoso, Ana Ecube, detalló como los otros dos acusados, el exdirector de la Selección masculina Albert Luque y el exdirector de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera, intentaron acercarse a la futbolista para tratar de que quitase importancia al beso, relatando presuntas coacciones y amenazas de no hacerlo.