El día 21 de enero se cumplen cien años desde la muerte de Lenin. Había nacido en 1870 en la ciudad rusa de Simbirsk a orillas del río Volga, durante el imperio ruso zarista. Vladímir Ilích Uliánov fue un político, revolucionario, teórico político, filósofo y líder comunista ruso, del sector bolchevique del Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia. Se convirtió en el principal dirigente de la Revolución de Octubre de 1917, nombrado presidente del Consejo de Comisarios del Pueblo, convirtiéndose en el primer y máximo dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas en 1922.
Una quiebra del sistema de distribución del grano lleva, en febrero de 1917, a una revolución que de la noche a la mañana echa a los Romanov. Esta situación provocó la creación de un Gobierno provisional, que incluía a los mencheviques, aunque pronto tuvo un contrapeso de poder con el llamado Soviet de Petrogrado, liderado por los bolcheviques, que no habían tenido ninguna relevancia en la caída previa del zarismo.
Lenin militó desde su juventud en la izquierda política revolucionaria. Durante sus estudios universitarios fue arrestado y exiliado durante tres años en Siberia. Luego huyó a varios países de Europa occidental, y llegó a convertirse en un destacado teórico del partido. Políticamente marxista, sus contribuciones al pensamiento marxista reciben el nombre de leninismo, o más conocido como marxismo-leninismo, ideología socialista que se expandiría por el mundo, principalmente desde la Guerra Fría.
Lenin consideraba que era necesaria realizar una pedagogía hacia el obrero por parte de una asociación de vanguardia, sobre la concepción de mejorar el futuro a largo plazo. Actualizó el concepto del capitalismo, ya que la industria había evolucionado considerablemente desde la concepción del Manifiesto Comunista, mostrando tolerancia cero al modelo capitalista. Según el leninismo no existe modo alguno de convivir de manera justa socialmente con el pensamiento capitalista, al que es necesario sustituir por un estado centralista y bajo la dictadura del proletariado.
Tras recibir noticias de la revolución de febrero, Lenin partió desde su exilio en Suiza hacia Rusia. En la noche del 15 de abril de 1917, miles de personas esperan con linternas en un andén en la Estación de Finlandia en Petrogrado. Al pisar suelo ruso comienza un discurso ante la multitud: Ya no está lejos la hora en que el pueblo volverá sus armas contra los capitalistas que lo explotan. La revolución rusa, hecha por vosotros, ha abierto una nueva era. ¡Viva la revolución socialista mundial!
El discurso tuvo relevancia histórica. Lenin comprendía que la experiencia de la guerra estaba preparando inevitablemente nuevas oleadas revolucionarias. La crisis finalmente estalló en Rusia en febrero de 1917, el eslabón más débil de la cadena del capitalismo mundial. Las protestas y huelgas se convirtieron en una revolución que derrumbó el edificio milenario del zarismo. Como ocurrió en 1905, aparecieron los sóviets al lado del gobierno provisional, constituyendo un régimen de doble poder, al principio dominados por los partidos reformistas, los mencheviques y los social-revolucionarios.
Lenin y varios marxistas de todo el mundo lanzaron en 1919 la Tercera Internacional o Internacional Comunista. Pero el proyecto de expansión del socialismo no triunfó. En el proceso de internacionalización que ocurre entre en los años 18 al 20, se intentaron insurrecciones en Alemania, Austria, o Hungría. Y este último es el único país en el que durante unos meses Bla Kun llega al poder a lo bolchevique (Julián Casanova).
4 de Abril de 1917, en el Palacio Táuride de Petrogrado, tras presentar las Tesis de Abril, Lenin se encontró completamente solo. El ala derecha de su partido lo acusó de anarquismo y de apelar a una guerra civil. El ala izquierda se apropió de las Tesis para convertirlas en un programa inmediato para derrocar al Gobierno provisional. Las Tesis pretendían poner las bases de un programa político a medio y largo plazo, para la conquista del poder por la clase trabajadora; así como mostrar el rechazo a la guerra.
Las Tesis de Abril son una serie de puntos expuestos por Lenin, que van definiendo la teoría leninista. Los historiadores las definen como el modelo más perfecto del marxismo creador revolucionario. Tenían el objetivo de promover la transformación revolucionaria en el mundo, de una revolución donde fueran protagonistas el proletariado y el campesinado.
Según León Trotsky, las Tesis de Abril de Lenin produjeron un choque de tendencias y una crisis dentro del partido, que si no se hubiera superado, la revolución no hubiera podido seguir adelante. Antes de la llegada de Lenin, un gran sector de la dirección del partido (entre ellos Stalin) estaban apoyando críticamente al Gobierno provisional formado por la burguesía, por lo que se tuvo que dar una gran batalla para que salieran adelante las Tesis. (algunos de sus puntos esenciales):
→ Ante la guerra, que por parte de Rusia sigue siendo una guerra imperialista, de rapiña, en virtud del carácter capitalista del Gobierno provisional, no se tolerará la más pequeña concesión al "defensismo revolucionario".
→ La peculiaridad del momento actual en Rusia, consiste en el paso de la primera etapa de la revolución, que ha dado el poder a la burguesía por carecer el proletariado del grado necesario de conciencia y organización. En una segunda etapa se debe poner el poder en manos del proletariado y de las capas pobres del campesinado.
→ Ningún apoyo al Gobierno provisional; explicando la falsedad de todas sus promesas, sobre todo de la renuncia a las anexiones. Desenmascarar al Gobierno, que es un gobierno de capitalistas, en vez de propugnar la inadmisible e ilusoria exigencia de que deje de ser imperialista.
→ Reconocer que, en la mayor parte de los Soviets de diputados obreros, nuestro partido está en minoría. Frente al bloque de todos los elementos pequeñoburgueses y oportunistas, sometidos a la influencia de la burguesía y que llevan dicha influencia al seno del proletariado, hay que explicar a las masas que los Soviets de diputados obreros son la única forma posible de gobierno revolucionario.
→ No a una república parlamentaria; volver a ella desde los Soviets de diputados obreros sería dar un paso atrás. Por el contrario si a una república de los Soviets de diputados obreros, braceros y campesinos en todo el país, de abajo arriba; así como la supresión de la policía, del ejército y de la burocracia.
→ En el ámbito agrario, hay que trasladar el centro de gravedad a los Soviets de diputados braceros; confiscando todas las tierras de los latifundios. Nacionalización de todas las tierras del país, de las que dispondrán los Soviets locales de diputados braceros y campesinos.
→ Fusión inmediata de todos los bancos del país en un Banco Nacional único, sometido al control de los Soviets de diputados obreros.
→ No a la implantación del socialismo de forma inmediata, sino pasar únicamente a la instauración del control de la producción social y de la distribución de los productos por los Soviets de diputados obreros.
La actitud de Lenin fue de rechazo frontal al "defensismo revolucionario". Se opuso a apoyar al Gobierno provisional, denunciar sus acciones y transferir el poder estatal a los Sóviets, exigiendo la creación de una república soviética no parlamentaria, considerando que el poder debía pasar a los obreros y campesinos pobres en una segunda revolución.
El leninismo se ha convertido en una doctrina política, económica y social, partiendo de su raíz marxista, Lenin estableció su propio punto de vista conformando uno de los tipos más extendidos del pensamiento comunista.
Lenin no logró en su época la ansiada expansión del socialismo, pero sí se sentaron las bases de lo que sería la Unión Soviética: una superpotencia que llegó a disputar la hegemonía mundial y que extendió su influencia durante los siguientes 70 años.
Las Tesis de Abril son el programa de una revolución que transferiría el poder al proletariado y a los campesinos. ¡Larga vida a la revolución socialista del mundo!