Reunidas, en la fecha indicada y el lugar de autos, las partes y sus partes, bajo la supervisión de notario, fedataria y testigos anónimos, se procede, primeramente, a la firma de la Inscripción en el Registro Oficial de Coitos Voluntarios (ver anexo) y la Aceptación de Sustituto de Coito (ver anexo de anexo), junto con el documento de «Sí, consiento», formato heterosexual (procedimiento disponible para otras opciones igualmente válidas, respetables y admirables, en las subcategorías de objeto pasivo, activo o neutro), según las condiciones pactadas y atendiendo a los hechos consumados reflejados en la presente Declaración de Coito.
De un lado, Fulanito M., (a partir de ahora, el macho), casado, ministro y empresario, y de otro, Menganita P., (a partir de ahora, la fémina), casada (con él), entregada a sus labores (por propia voluntad y con Empoderamiento Oficial Registrado n.º …), deciden ambos, en plena posesión de sus facultades mentales y sexuales, llevar a cabo la relación sexual programada nº …, con penetración, grado 5, incluyéndose tocamientos en las zonas erógenas y no erógenas, como se indica en el siguiente apartado.
Tocamientos
1. Muslos, comprendiendo tanto zona isquiotibial como cuádriceps.
2. Cintura, circunscrita a los flancos, y excluyéndose, en esta ocasión y por deseo expreso de la fémina, tanto lumbares como aledaños del ombligo.
3. Pechos, adaptado el tocamiento al nivel de presión 2, quizir: sin apretar.
4. Hombros y cuello, exclusivamente con la mano libre (entendiéndose la de no apoyo).
5. Nalgas, en toda su extensión.
6. Partes pudendas, previo lavado de manos con gel hidroalcohólico.
En cuanto al uso de la boca, se limitará, atendiendo a la voluntad de la fémina, al casto y aséptico beso de morros o «pico».
Penetración
La fémina abajo firmante otorga poder temporal y exclusivo al macho para que, llegado el momento oportuno, aquel, siempre tumbado en el lecho sobre su espalda, pasivo y callado, le ofrezca su miembro erecto, el cual ella, a horcajadas, voluntaria y activamente, introducirá (o no) en su vagina.
Consumación
Y para que conste y no hubiere dudas, malas interpretaciones y acelerados juicios, el notario, en la figura de mi persona, la fedataria y los testigos anónimos, damos cuenta de los hechos, que presenciamos con nuestros propios ojos, y ofrecemos una detallada relación de las irregularidades detectadas.
1. En la cúspide de la fase preliminar, el macho piropeó a la fémina en unos términos visiblemente discordantes con la preceptiva, derrochando evidentes manifestaciones de una insana y largamente reprimida acumulación de líbido. La fémina expresó desaprobación con un estridente: «¡cállate!».
2. La insufrible inoperancia del maltrecho aparato genital masculino, despertó apasionadas recriminaciones por parte de la fémina, llegándose finalmente a un acuerdo de no insistencia, rubricado por ambas partes, según convenio (ver anexo).
Así, los presentes damos fe, por nuestro honor, de que el coito objeto de consentimiento no llegó a producirse en las condiciones ni el ambiente adecuados a dicho fin.
No obstante lo cual, el permiso objeto de la presente podrá ser revocado desde ahora mismo y en cualquier momento, despertándose así, por sorpresa, las consiguientes consecuencias penales (con carácter retroactivo y hereditario) para el macho y descendientes machos, en tanto los tocamientos y el amago de penetración son hechos reconocidos y, por tanto, susceptibles de denuncia, oh sí, por parte del Ministerio Fiscal, la fémina y descendientes féminas, abriéndose un periodo ilimitado para las actuaciones, las multas, los encarcelamientos y, llegado el caso y la moda y por qué no, los autos de fe.
Y para que conste y surta los efectos que Dios quiera, lo firman los abajo firmantes.
En Bruselas, a 10 de septiembre de 2025.
Las partes, con sus partes. La autoridad competente, con bolígrafo.