La semana pasada tras los resultados de las elecciones en Galicia y la baja participación desde el exterior, pude expresar un sentimiento compartido por una gran parte de la diáspora, de desilusión por la baja participación de los emigrantes en unas elecciones.
Los que no comparten este sentimiento seguramente será porque pertenecen a ese sector de la emigración que no les preocupa para nada lo que suceda en España.
Planteaba la necesidad de que la población emigrante participe votando en las elecciones de las diferentes comunidades autónomas, elecciones europeas, o en las generales…y si no participa no debería quejarse de la falta de recursos consulares o falta de interés de los partidos e instituciones en los casi 3 millones de españoles españolas en el exterior.
La población española en el exterior además de participar activamente en las decisiones sería positivo que compartiera cultura, valores y un apego hacia España y esto solo se puede hacer conociendo lo que pasa en nuestro país y los avances en nuestra sociedad.
En muchos casos nos encontramos con ciudadanos o ciudadanas que no muestran ningún interés por avanzar al ritmo que nuestro país y en algunos casos nuestros Consulados Generales se dan de bruces con una realidad ingrata: algunos y algunas son españoles solo para lo que les interesa.
Hablando hace unas semanas con personal de nuestra red consular se me explicó el caso de ciudadanía española que tras haber jurado la constitución y adherirse a los principios y valores democráticos y modernos de un estado como el español, pueden llegar un tiempo después solicitando tramites que son contrarios al derecho y valores que compartimos en nuestro país.
Hay ciudadanía que intenta registrar matrimonios, cuando ya están casados, aduciendo a que en su cultura original la poligamia esta aceptada.
Da igual que ahora vivan en un país europeo y que su pasaporte español demuestre que poseen una nacionalidad española que no entran a considerar cuando quieren ejercer una poligamia que solo se permite en un puñado de países en el mundo.
Igualmente ha habido Consulados Generales que han investigado y han podido parar en los aeropuertos algunos viajes de menores a ciertos países. Viajes planeados por sus familias, sin su consentimiento y con la intención de casarlos en matrimonios de conveniencia que tampoco son permitidos ni por nuestro país, ni por ninguna cultura occidental.
Tenemos ciudadanos y ciudadanas que tampoco consideran que los avances en tolerancia e igualdad vayan con ellos y perpetúan comportamientos retrógrados, misóginos, machistas y homófobos ya que en sus países de residencia o no habido avances en su sociedad al ritmo de los habidos en España en las 2 ultimas décadas, o simplemente ignoran cualquier avance, bien basándose en un negacionismo ridículo, unos valores religiosos obsoletos o una cultura anclada en el pasado.
El 8M que celebraremos la semana que viene es un marco insuperable para volver a poner encima de la mesa los muchos aspectos en los que nuestra sociedad tiene que seguir trabajando para intentar algún día tener una sociedad igualitaria y justa para todas y todos los ciudadanos.
Cada año la ONU nos ofrece un tema en el que centrar el discurso y este 2024 el tema será la falta de financiación de los derechos de las mujeres para acelerar la igualdad.
Sin recursos y dinero detrás las leyes dejan de poder llevarse a cabo…que se lo digan a los descendientes de aquellas personas asesinadas y enterradas en cunetas en algunas comunidades autónomas que decidieron dejar de financiar las excavaciones que permitía la Ley de Memoria Histórica o ahora la Ley de Memoria Democrática.
Lo que se vota si no se financia no se cumple y queda en papel mojado.
La difusión de nuestras leyes ha de expandirse al exterior y nuestros casi 3 millones de españoles y españoles en el exterior deberían asegurarse de que promueven los avances de nuestro país y en el caso de que retornen a España lo hagan conociendo, respetando, y adhiriéndose a nuestros valores. Deberán saber que una vez estén en España ciertos comportamientos no solo serán repudiados, sino que en muchos casos estarán contraviniendo leyes y podrían acabar cometiendo delitos de odio por comentarios y acciones fuera de lugar.
Fechas como el 8M han de servir como una marco ideal no solo para rememorar de donde surge este día y todo lo que falta por lograr, pero también para poder educar a aquellas personas que aun en 2024 no entienden porque es necesario seguir con estas reivindicaciones.
En Reino Unido se ha creado una Plataforma Feminista (PlaFemUK) y la semana del 8M va a realizar una serie de charlas que van desde la asistencia consular a victimas de violencia de género, a un charla entre mujeres de varias generaciones que puedan explicarnos su visión y experiencias, una mesa redonda para hablar de como ocupar el espacio de la mujer en el mundo o un taller en el que hablaremos de nuevas masculinidades.
Para este taller de masculinidades y machismo contaremos con un experto divulgador en esta materia, Raúl Rojas.
Raúl es Licenciado en Filosofía y con un Máster en Análisis Sociocultural del Conocimiento y la Comunicación por la Universidad Complutense de Madrid y es Doctor en Filosofía Política por la Universidad de Castilla La Mancha y es Agente de Igualdad por la UNED.
Los casi 3 millones de emigrantes españoles en el exterior vivimos en sociedades muy diferentes. Muchos viven en países sin derechos humanos ni rastro de igualdad y algunos vivimos en sociedades que están un poco más avanzadas que España…pero la dirección del viaje aun por recorrer es clara, y al igual que con el cambio climático hay fechas que no pueden sobrepasarse sin cambios drásticos, en el tema del feminismo llegamos tarde igualmente y hay que acelerar el proceso.
No puede haber excusas por parte de nuestra ciudadanía y da igual donde vivamos…el progreso que España ha experimentado en multitud de áreas tenemos que expandirlo allá donde vivamos y debemos ser embajadores y embajadoras de nuestros valores y cultura….España no solo para lo que nos convenga.