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Elogio del billete

26 de Mayo de 2021
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foto billetes tintados

El dinero efectivo es la máxima culminación, evolución del trueque. De lo contrario, ¿cuántas gallinas tendría que reunir el granjero para compensar al vendedor del coche que no-quiere-gallinas? Pues aquí entra el billete, muchacho, listo para trocar por lo que deseas o necesitas. El mundo accedió a esta bendita “sociedad del conocimiento” que tanto promulgáis gracias a la imprenta y el dinero (lo impreso, página de libro o billete, no se elimina con un “clic”…). Manda a la niña a por chuches cuando retiren el efectivo. Precisarás una transferencia y la niña acudirá al quiosco (si existe) abonando con tarjeta el importe de sus gominolas; quizir: nuevas comisiones, (¿impuestos por la adquisición de artículos insanos, de baja estofa: alarma automática, inmediata, en coordinación con el pediatra oficial de la República Popular de España?), fiesta de amonestaciones múltiples, consiguiente aumento del fraude institucional, oficial.

¿Qué harán todos esos dueños de talleres mecánicos, negocios de reformas, pintores, gestores, autónomos que necesitan el dinero negro para salir adelante? ¿Cómo van a pagar esas mitades de salarios? El plan es construir un Sistema de trabajadores controlando salud, hábitos, aficiones. Una sociedad limpia de outsiders, con un destino único para los jóvenes: obediencia a punta de multa, donde solo unos pocos privilegiados gocen de todo lo ilegal, inmoral o que engorda, como la canción; en definitiva, de todo lo bueno.

La Libertad con mayúscula tiene cara de billete, porque en este mundo de mentiras, injusticias, donde no se paga por el valor real de las cosas, sino por lo que cada pícaro solicita por ellas, el billete es, paradójicamente, la única solución, herramienta para escapar de los abusos del mal trueque y equilibrar los intercambios, ampliando el espectro de actividades más allá de la cría de gallinas, el cultivo de lechugas, la producción de teléfonos móviles, mascarillas o pantallas.

Intentad eliminar el billete, y sobrevivirá más sumergido que nunca. Seguid atentando contra la propiedad privada y el fruto del trabajo de mucha gente, y ya veréis.

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