Se acercan las elecciones generales y el avispero esta revuelto. Esto se parece al ultimo día de los fichajes de jugadores de futbol. Cada uno quiere dar la sorpresa. Aunque todo sea más de lo mismo. En este caso con la novedad del veto a candidatos de Podemos. El BNG ha realizado las asambleas locales y este fin de semana se realizo una asamblea general donde se propusieron nombres para las candidaturas a diputados y senadores. El que está seguro y cuenta con el máximo de apoyos es Néstor Rego. Para algunos analistas parlamentarios fue el diputado más activo del Congreso que puso a Galiza en la agenda estatal del gobierno. Rego tiene una larga experiencia militante y un fluido discurso nacionalista. A veces no se necesitan muchos representantes en el parlamento cuando la mayoría faltan o están en otros “negocios” Recuerdo el gran papel que jugó en el Parlamento de Deputados el comunista canario Fernando Sagaseta, en representación de Unión del Pueblo Canario. Un solo diputado hacia más trabajo parlamentar que los masivos bloques de los partido tradicionales del sistema. Mucho me hace recordar ahora a Néstor Rego, con aquel valiente comunista canario.. Los tiempos fueron cambiando y los aspectos burocráticos del Congreso requieren más representación, para poder abordar los numerosos casos a debatir. El Parlamento es un instrumento más de lucha política es una continuación de la lucha de clases, pero también se convierte en una trampa. Las masas depositan su confianza en los representantes de la burguesía, mientras los movimientos sociales el movimiento sindical se desarticula, se desmoviliza, perdiendo el poder de presión efectiva en las calles. Esto mismo le paso a Podemos, logro un grupo importante de diputados, abandono las estructuras de base y se introdujo en la maraña burocrática del parlamento. En la historia de la humanidad, el poder central está en la unidad y movilización de los sectores excluidos de la sociedad. El ejemplo más patético del abandono de la lucha reivindicativa son los dos sindicatos UGT y CCOO que fueron referentes de las necesidades del los trabajadores y el pueblo. Hoy son organizaciones reformistas al servicio del sistema y del gobierno de turno.
La izquierda estatal hace muchos años que ha perdido la brújula, Se convirtieron en avalistas de las democracias liberales, abandonando la idea de una sociedad superadora del capitalismo salvaje.
La izquierda está pasando una etapa crítica. En Europa avanzando el fascismo y en América latina con gobiernos progresistas, conviviendo con políticas neoliberales. Urge un gran debate sobre cuál es la izquierda que se necesita y como debe actuar. La pensadora argentina Cubana Isabel Rauber en este sentido ha señalado “
“Un mundo mejor será posible si se transforma de raíz, desde el interior de nosotros mismos y el de nuestras organizaciones sociales y políticas, desde el presente. En este empeño, los sujetos y sus subjetividades afloran a un plano primero, centrando las reflexiones en los protagonistas que piensan y realizan las transformaciones, los sujetos político-sociales de los cambios revolucionarios”
La tarea no será fácil, este es el desafío.