La respuesta a la actitud de los agentes de Jusapol debería ser contundente

Declaraciones como estas que puedes ver a continuación se han dicho hoy en la manifestación que Jusapol ha organizado en Madrid.https://twitter.com/BeatrizTalegon/status/1234915893588766720?s=20Los agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil que forman parte del colectivo Jusapol (que en un principio pide equiparación salarial, pero que con el tiempo se ha venido demostrando ser algo más allá, vinculado con organizaciones políticas de derecha y extrema derecha), hacen declaraciones graves, autoritarias y absolutamente fuera de lugar por parte de la función que se supone que han de desempeñar.Ya el hecho de que la consigna para acudir a la manifestación fuera ir con las caras tapadas dice mucho del tipo de perfil que representan los que así han acudido hoy a Madrid. Con bengalas, y en una actitud absolutamente inaceptable con diputados del Congreso a quienes, como en el caso de Laura Borrás han insultado gravemente mientras le amenazaban con bengalas.Como puede verse en el video algunos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se sienten (y se saben) impunes: aunque algunos son tan valientes como para amenazar con la cara cubierta. Algo que a cualquier otro ciudadano le podría costar duras sanciones, está por ver si tendrá consecuencias.Cabe recordar que hoy han saltado el cordón policial, han rodeado el Congreso y en ningún momento se ha producido ninguna carga policial por parte de quienes estaban trabajando en la seguridad de la zona. De hecho, ni siquiera los agentes de la Policía Nacional que trabajan en el Congreso de los Diputados han movido un dedo cuando una diputada ha solicitado su seguridad para llegar hasta un coche y poder salir del hemiciclo. Han tenido que ser los trabajadores del propio Congreso quienes han tenido que ayudar a la diputada para poder salir de allí entre insultos y gritos.Las imágenes en las que hemos podido ver a dirigentes de Vox haciendo el símbolo de una pistola con los dedos debería tener respuesta por parte de las instituciones. Amenazar de este modo al gobierno, y a todo aquel que no comparta con esta gente su manera de entender la vida no debería tener cabida en un estado de Derecho democrático. Es, sencillamente, una actitud que jamás deberían tener quienes han de velar por la seguridad de todos. Lo que generan es, precisamente, inseguridad, desconfianza y una sensación profundamente lamentable y triste. Porque esta gente es la que se supone que tiene la facultad de ejercer la fuerza, siempre en los parámetros y en el contexto que se lo permite. Sin embargo, al ver estas declaraciones y la actitud con la que les llevamos viendo últimamente, estamos ante una situación de alarma.Llamadas amenazantes, "aquí manda la policía", son afirmaciones que, repito, deben encontrar respuesta contundente por parte del Gobierno. Sin ambages.Hay que recordar que por una simple manifestación hay personas condenadas por sedición. Hay que recordar, también las cargas policiales contra manifestantes que no han hecho absolutamente nada. Hoy, sin embargo podemos entender qué podría estar ocurriendo. Y Sánchez tiene ahora la responsabilidad de poner fin a esta situación, porque sencillamente es aberrante.Una cosa es defender derechos laborales y otra muy distinta es lo que estamos viendo. Y por cierto: existen policías demócratas que entienden que esto que está pasando es lamentable. Para la sociedad española pero sobre todo para las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado: ¿por qué no salen a dejar claro que esto no les representa? ¿Dónde están?